Después de cuatro meses, regresa a Sudamérica la fiesta del fútbol a través de las Eliminatorias. Por eso, los hinchas de Colombia y Bolivia no dudaron en invadir las calles de Barranquilla para poner la cuota de alegría.
Las inmediaciones del estadio Metropolitano se pintaron de color amarillo. Miles de hinchas alentaron desde temprano al equipo de José Néstor Pékerman, que necesita una victorias para meterse en los puestos de clasificación.
Dentro del coloso, los fanáticos vistieron las camisetas de James Rodríguez, el capitán de la selección de Colombia en las Eliminatorias. Aunque otros prefirieron recordar a Radamel Falcao, ausente por lesión.
Máscaras, silbatos, banderas, rostros pintados (dentro y fuera de la cancha). Así vivieron los hinchas colombianos la emoción de ver, otra vez, a la selección de su país.
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