Los tiros libres puede definir un partido, por ello es importante que los equipos siempre tenga a un encargado, bien entrenado, que pueda disparar las faltas. Un ejemplo claro es Cristiano Ronaldo, el portugués es amo y señor de los tiros directos del Real Madrid, muy rara vez, vemos a otro tomar el balón. Un ejemplo claro fue en la final del Mundial de Clubes ante Gremio.
Lo mismo sucede con Lionel Messi, el astro del Barcelona, siempre demuestra que tiene una facilidad para anotar de balón parado. Tanto en España como con la Selección Argentina logra maravillas de tiro libre.
El máximo referente del balón detenido es Andrea Pirlo. El italiano, que dejó el fútbol en el 2017, demostraba cada vez que se encontraba frente al balón su técnica y maestría para defnir y colocarlo por encima de la barrera y lo más lejos posible del arquero rival. Sin embargo, no es el primero en la lista.