Si se tomaban en cuenta los primeros partidos de Ecuador en las Eliminatorias Rusia 2018, muchos daban por sentado su presencia en el Mundial, al menos en repechaje. Con un juego de pelota al piso y contragolpe, los exdirigidos por Gustavo Quinteros daban el golpe en Sudamérica. Sin embargo, el declive en el nivel del 'Tricolor' sorprendió a más de uno, sobre todo porque el cuadro empezó de buena manera su periplo en el torneo premundialista. Con un Estadio Atahualpa de la ciudad de Quito como recinto donde en su mayoría obtenía triunfos en condición de local, poco a poco fue cayendo en su nivel, humillado también en tierras ajenas y quedando como uno de los últimos de la tabla en la región.
Por ejemplo, en las primeras cinco jornadas sumó cuatro victorias y un empate. Incluso, le llegó a ganar a la mismísima Argentina de Gerardo 'Tata' Martino en el Monumental de Buenos Aires por 2-0. Como nada dura para siempre, desde el empate frente a Paraguay en casa en marzo de 2016, todo fue una pesadilla para los norteños.
De un momento a otro, la Selección de Ecuador vio cómo sus principales figuras como Antonio Valencia no rendían lo esperado. Además, los problemas extrafutbolísticos también fueron el pan de cada día en la interna del equipo. Por ejemplo, Enner Valencia tuvo que ‘escaparse’ en camilla en el duelo contra Chile en Quito por adeudar más de 20 mil dólares por un juicio de alimentos.
Días después, en octubre del año pasado se hizo pública otra lista de futbolistas del seleccionado ecuatoriano que afrontaban el mismo problema. Cristian Ramírez, Pedro Quiñónez, Renato Ibarra, Juan Carlos Paredes y Daniel Angulo fueron otros de los nombres que no asumían sus responsabilidades con sus hijos. La gota que rebalsó el vaso fue la fiesta de un grupo del plantel previo al choque frente a la ‘Albiceleste’ en la última jornada. Y el panorama no parece alentador de cara a los próximos años.
No obstante, la situación es muy distinta a nivel de clubes. Los equipos de Ecuador han dejado más que una buena labor en las últimas ediciones de los torneos de la región. Por ejemplo, esta semana Barcelona SC jugará la ida de semifinales de la Copa Libertadores 2017 contra Gremio. El elenco ‘canario’ dejó en el camino a otros grandes conjuntos del continente como Estudiantes de La Plata, Atlético Nacional, Palmeiras y Santos de Brasil. Lo más destacado es que los equipos de ese país cumplen un buen papel desde hace algunos años (VER TABLA):
La progresión es evidente en acomodarse en instancias decisivas en los campeonatos sudamericanos. ¿Cómo así? Todo tiene un por qué. Los clubes ecuatorianos están cada vez más enfocados en sus divisiones menores para tener jugadores de nivel en el mediano plazo. Prueba de ello es lo que nos comentó en enero de este año Santiago Morales, gerente deportivo del Independiente del Valle.
"Casi todos los años hemos participado en torneos internacionales. El rigor de la competencia en el extranjero ha hecho que mejoremos. Nuestro objetivo ser la base de la Selección de Ecuador en las Eliminatorias y, si es que llega, también del Mundial", le dijo a Depor en ese entonces. Es más, se ha invertido capital para el desarrollo de las categorías inferiores del país. "Hay hasta 120 chicos que viven y estudian en nuestras instalaciones. En cuatro años podríamos palpar los resultados", añadió. ¿Se podrá revertir lo mal que está la Selección mayor de aquí a Qatar 2022? ¿Y con el retiro de Felipe Caicedo? Solo el tiempo lo dirá.