El 21 de enero, nueve futbolistas de Arabia Saudita aterrizaron en España, causando la sorpresa de todos los aficionados, quienes vieron cómo tres equipos de Primera, en la Liga Santander, y seis de Segunda se reforzaban con completos ‘desconocidos’.
¿La explicación? Un acuerdo de la Liga con la federación saudí: los clubes españoles iban a recibir dinero a cambio de acoger a un futbolista árabe a préstamo (a costo cero), que podía crecer mucho más entrenando en España, que jugando en el torneo de su país.
Parte del trato, además, es difundir la presencia de los asiáticos en la ‘Liga de las estrellas’, a través de las redes sociales (Facebook, Twitter e Instagram). Y, claro, aumentar la exposición a través de la venta de camisetas y souvenirs en Arabia Saudita, y a la vez en todo el continente.
Un mes después, sin embargo, ninguno de esos futbolistas ha sumado un solo minuto en la Liga (y también en la Segunda División). “Si fueran jugadores de primer nivel, seguramente no pagarían por venir”, contó un allegado a la Federación española a Cadena Ser.
Puede que en campo estos clubes no hayan sacado alguna ventaja, pero sí en sus cuentas bancarias. Ojo que es solo el comienzo de un pacto, algo polémico, pero que a ambas partes le rinde frutos.
Yahia Sahiri (Leganés)
Fahad Muwallad (Levante)
Salmam Al Dawsari (Villarreal)
Ali Al Namer (Numancia)
Abdulmajeed Al Sulaiheem (Rayo Vallecano)
Abdullah Alhamdan (Sporting de Gijón)
Nooh Al Mousa (Real Valladolid)
Marwan Othmnan (cantera del Leganés)
Jabor Issa (cantera del Villarreal)
Por Gabriel Casimiro
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