El 30 de junio, su contrato con un club de segunda división inglesa, Reading, llegó a su término. Un día después, el 1 de julio, sin empleo, Hal Robson-Kanu marcó a Bélgica uno de los goles más importantes de la historia de Gales, que clasificó a su país para semifinales de la Eurocopa 2016.
"Creo que contra Bélgica estaba dispuesto a dar todo. Buscaba una batalla, iba en permanencia al contacto con los defensas, corría por todos los sitios. Es fuerte físicamente y pienso que es una pesadilla para las defensas rivales", resumió el seleccionador galés Chris Coleman tras el partido.
El técnico estaba en una nube tras la clasificación histórica de su selección para la semifinal de una Eurocopa, cuando participaba por primera vez en su historia. Pero no se olvidó de rendir homenaje al delantero de 27 años que, tras un centro de Aaron Ramsey, sorprendió a tres defensas belgas y con un giro marcó el segundo gol galés, preámbulo de la victoria final por 3-1.
"Tal vez había dos compañeros mejor colocados que él, pero sabía que lo iba a intentar", explicó Coleman sobre esa imitación de Cruyff. "Tiene mucho entusiasmo, casi se pierde el torneo ya que se lesionó durante nuestra preparación en Portugal. Ha trabajado mucho para ser competitivo y mereció el gol", dijo.
En Reading desde 2009, conoció la Premier League y la segunda división inglesa sin superar nunca los siete goles por temporada (media de 4,2 por campaña). Su contrato con el ex club de Paolo Hurtado expiró el 30 de junio, sin que su club haya querido prolongarlo.
Su club se estará tirando de los pelos, ya que tras su gran Eurocopa seguramente ahora sacaría beneficios con su venta. Pero Robson Kanu, inglés de nacimiento y que representa a Gales por una abuela, fue primero rechazado por el Arsenal a los 15 años, tras haberse formado en su academia, para pasar al Reading.
Robson Kanu fue internacional inglés Sub-19 contra Alemania y Croacia en 2007, antes de jugar una vez con la Sub-20 contra Montenegro en 2009. En 2010, con 21 años decidió pasar a la selección galesa, ante las pocas oportunidades que tenía con Inglaterra, debido a que una abuela suya había nacido allí.
Robson Kanu jugó nueve partidos con Gales en las eliminatorias a la Eurocopa 2016. El 11 de junio pasado, tras entrar en la cancha en el minuto 71 en el debut en la Eurocopa contra Eslovaquia, marcó el gol de la victoria (2-1) en Burdeos.
Un día después de que su contrato terminara, la UEFA lo elegía mejor jugador del partido en una eliminatoria de cuartos de final de la Eurocopa, en una jornada histórica para su país, que jugará la primera semifinal de un torneo grande, el miércoles en Lyon contra Portugal.
"Estamos contentos, hace varios años que trabajamos para esto", señaló el jugador tras el partido. "Hemos llenado de orgullo a un país. Sabíamos que no estábamos entre los favoritos, pero sabíamos que teníamos calidad", añadió.
Difícil encontrar a alguien que hubiera apostado por la presencia de la pequeña nación británica en semifinales de la Eurocopa. Los tres goleadores del viernes contra Bélgica son casi desconocidos en la escena continental: además de Robson-Kanu, el capitán Ashley Williams juega en el Swansea, y Sam Vokes acaba de ascender a la Premier League con Burnley.
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