Si bien es difícil ser una promesa, mucho más complicado es lograr el pase hacia realidad. Muchos jugadores ven la temporada 2017-18 como la posibilidad de convertirse en futbolista top de Europa.
Kylian Mbappé tuvo un comienzo en el 2017 impresionante. Fue uno de los mayores protagonistas para que el AS Mónaco salga campeón de la Ligue 1. Sin embargo, esta temporada debe asentarse para ser considerado como uno de los mejores del mundo.
Lo mismo sucede con Gabriel Jesus. El brasileño llegó al Manchester City y marcó una gran diferencia. Lamentablemente las lesiones no le permitieron tener la regularidad que deseaba. Esta es su temporada.