Youssef El Arabi no pudo celebrar a lo grande el bicampeonato que obtuvo con Olympiacos y el haber salido nuevamente como el máximo artillero de la Superliga de Grecia. El atacante marroquí recibió esta semana un duro golpe. La justicia de francesa lo sentenció a un año de prisión por un caso de violencia contra menores de edad ocurrido en Montpellier el año 2017.
Según informó el medio galo Midi Libre, el futbolista de 34 años golpeó, junto a sus hermanos y cuñado, a dos adolescentes de 13 y 16 años. ¿La razón? Estos chicos arrojaron botellas de vidrio a la casa del artillero, cuando se encontraba festejando el fin del Ramadán, fecha sagrada de los musulmanes.
Tras el acto vandálico, los menores huyeron rápidamente del lugar mientras eran perseguidos por el exGranada y sus familiares, quienes al alcanzarlos no dudaron en arremeter contra ellos de forma física.
Con respecto al grado de violencia usado, el jugador señaló que solo le dieron unos golpes con mano abierta en el cuello, y que nunca llegaron a producirles heridas cortantes, ni mucho menos hubo sangre.
Pese a la confesión del marroquí, la corte de Montpellier lo condenó a un año de cárcel y una multa de 3 000 euros. Asimismo, tendrá que abonarle a los adolescentes 13 mil euros de indemnización.
La defensa de El Arabi precisó que presentarán una apelación al fallo judicial :”La reacción de sus defendidos fue completamente normal, producto de la ansiedad y el miedo que sintieron al ser atacados con botellas de cristal, cuando había en la zona del ataque varios niños, todos menores de 5 años”.
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