Todos somos generales después de la batalla, pero siempre es importante sacar conclusiones para sostener lo que se hizo bien y mejorar lo que está mal. Alianza Lima tuvo un buen partido contra Fluminense en Matute y hasta pudo ganarlo en cierto momento; sin embargo, esa falta de efectividad le pasó factura para darle la estocada final a su rival y cedió un empate 1-1 en casa que genera cierta incomodidad. El escenario ideal era el triunfo; aunque hay otras cosas por valorar más allá del resultado. El debut en la Copa Libertadores sirvió al técnico Alejandro Restrepo para confirmar lo que ya venía dando vueltas en su cabeza, como la inclusión de Kevin Serna como delantero.
El colombiano fue el jugador más determinante del partido y anotó el único gol de Alianza Lima esa noche. Dejó de lado la banda derecha para ubicarse más cerca del arco, al lado de Cecilio Waterman, y brindar su mejor actuación desde que llegó a La Victoria. Como él, existen otros detalles que Restrepo deberá tomar en cuenta para su futura alineación, sabiendo que funciona y que es posible potenciar al equipo de esa forma. Aquí un repaso a lo que se vio en el campo ante Fluminense.
- El último once de Alianza Lima
Kevin Serna debe ser delantero
Cuando Restrepo confirmó la alineación ante Fluminense, llamó la atención la posición de Kevin Serna. El colombiano dejó el carril derecho para situarse junto a Cecilio Waterman en el ataque, como un segundo delantero que podía aportarle movilidad al equipo. Desde esa nueva posición, el atacante fue el más peligroso de la noche: no solo marcó un gol, también tuvo dos ocasiones claras para estirar la ventaja en el marcador. Su desempeño estuvo cerca de los 8 puntos, según Sofascore, y se le notó bastante cómodo en esa zona del campo. Supo adaptarse a su nueva función, con la libertad para jugar más cerca del arco y la capacidad para anotar.
Ese cambio táctico le hizo un bien a Alianza Lima, porque Restrepo venía colocándolo como carrilero derecho en su sistema 3-5-2. En esa posición, Serna debía hacer un despliegue físico impresionante, desbordando por la banda y retrocediendo para colaborar con la marca. Al ser un jugador de corte ofensivo, la dificultad siempre estuvo a la hora de defender. Con espacios, es un futbolista que puede ser determinante; pero cada partido es distinto y no siempre se da esa situación. En cambio, jugando de delantero, puede darle otra dinámica al equipo, siendo un complemento que viene de atrás eludiendo rivales y encarando hacia el gol. Tiene esa explosión que quizá Hernán Barcos o Jeriel De Santis no poseen.
Juan Pablo Freytes va por izquierda
Puede decirse que Restrepo también encontró a su carrilero por izquierda. Tras la lesión de Ricardo Lagos, todo hacía indicar que Jhamir D’Arrigo era el reemplazante ideal por esa zona del campo; pero lo mostrado hasta ahora por el jugador no convence al técnico colombiano, quien optó por colocar a Juan Pablo Freytes en esa posición. El argentino venía desempeñándose como stopper por izquierda, unos metros más retrasado del lugar que ahora ocupa. Y si bien no lo hacía mal desde allí, el cambio de posición fue una medida de urgencia por la situación del equipo que resultó bien.
Freyes disputó dos partidos de titular como carrilero por izquierda (ante Los Chanckas y Fluminense) y cumplió desde lo táctico. Estuvo bien posicionado a la hora de defender y casi siempre se mostró como una opción de pase por la banda al momento de atacar. Si bien no es un jugador que desborda con su talento individual, posee esa potencia física para realizar el recorrido y hacer un partido disciplinado. Siendo un futbolista de corte defensivo, cumple arriba y abajo, entiende la posición y representa una solución momentánea para Restrepo. El técnico sabe que el argentino puede rendir gracias a su polifuncionalidad.
Carlos Zambrano es el líder de la defensa
La reinclusión de Carlos Zambrano al equipo fue un acierto desde lo futbolístico que se confirmó en el juego contra Fluminense. Hacía falta un líder en la defensa, un futbolista con jerarquía, experiencia y gravitante en su posición. Y el ‘Káiser’ cumple con esos requisitos, porque en poco tiempo pudo convencer a Restrepo de su importancia dentro del campo. Pasó de suplente a titular en solo tres partidos, llevando incluso la cinta de capitán en el brazo y brindándole seguridad a la línea de tres con la que suele jugar.
La presencia de Zambrano como líbero le permite a Alianza Lima encontrar un equilibrio defensivo que antes no tenía. Contra el ‘Flu’, hizo un partido correcto, asumiendo esa responsabilidad para ordenar a sus compañeros desde atrás y resolviendo cuando había que hacerlo. Se le nota cómodo en dicha posición, tiene la confianza para tomar riesgos y le da salida limpia al equipo. Está afianzado como el líder de la defensa blanquiazul, una posición que anteriormente la desempeñaron Aldair Fuentes y Renzo Garcés. El ‘León’ le da la tranquilidad que Restrepo necesitaba en ese lugar.
Sebastián Rodríguez es fijo en el medio
La lesión de Adrián Arregui no fue un dolor de cabeza para Restrepo. Cuando parecía que jugadores como Jesús Castillo o Aldair Fuentes podían situarse como volantes de marca, el colombiano optó por Sebastián Rodríguez para ocupar esa zona. Desde allí, el uruguayo ha tenido un mejor rendimiento, con un panorama amplio del juego y convirtiéndose en el nexo entre la defensa y el ataque. Lleva tres partidos disputados en esa zona (Alianza Atlético, Los Chankas y Fluminense) y en cada uno de ellos destacó. Pero necesita apoyarse en Jesús Castillo y Catriel Cabellos para sostener su juego y cubrir los espacios. No es un futbolista aguerrido como Arregui, pero tiene ese pase limpio para cambiar el ritmo desde el mediocampo.
Pareciera que la posición actual de Rodríguez le plantea un dilema bonito a Restrepo, porque usualmente hacía jugar a ‘Bigote’ y a Arregui a la vez. De momento, colocar al uruguayo en esa zona le quita espacio al argentino; sin embargo, el técnico colombiano deberá evaluar la situación y tomar una decisión. Es posible que el retorno de Adrián cambie un poco la alineación de Alianza Lima y uno de los anteriores mencionados sea el sacrificado. Pero, más allá de eso, el equipo debe funcionar, sobre todo por el desgaste físico que implica disputar la Liga 1 Te Apuesto y la Copa Libertadores a la vez.
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