Cambio de planes. UTC recibirá a Rampla Juniors en el Estadio Miguel Grau del Callao, muy lejos de Cajamarca. El equipo de Franco Navarro tendrá que viajar hasta el primer puerto para debutar en la Copa Sudamericana 2018. Esta mudanza no es nada nuevo para los conjuntos peruanos, más bien, es un caso cotidiano.
En nuestro primer partido, en la Copa Sudamericana 2002, Alianza Lima se mudó al Estadio Nacional para enfrentar a la 'U', que hizo lo mismo en el choque de vuelta. Una mejor taquilla fue el motivo principal del cambio. Esto no es nada comparado a otros equipos que se vieron obligados a moverse hasta de ciudad por varias razones.
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Cuando todo el Cusco soñaba con llenar el Garcilaso para ver la final de la Copa Sudamericana 2003, la CONMEBOL frenó este deseo. El aforo mínimo para ese partido era de 40 mil personas, medida que no cumplía su estadio en aquel entonces, y Cienciano recibió a River Plate en el Monumental de Arequipa.
El caso más escandaloso sucedió en 2008. Sport Áncash dejó hasta la altura, y fue local ante Palmeiras en el Estadio Nacional de Lima. Se acusó que el presidente del club habría aceptado "una sugerencia" para el cambio de escenario. La 'Amenaza', Unión Comercio y Comerciantes Unidos son los únicos equipos peruanos que nunca jugaron en su ciudad por Copa Sudamericana.
Alianza Altético se mudó cuatro veces al Estadio Miguel Grau de Piura (a 42 kilómetros de Sullana) porque el Campeones del 36 no contaba con iluminación artificial. La suspensión del Estadio Monumental obligó a la 'U' a ir hasta el Callao en la Copa Sudamericana 2011.
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