Este martes 14 de marzo, Alianza Lima, una vez más, dio a conocer su postura en relación a los derechos de transmisión de la Liga 1. Y es que la institución blanquiazul, a través de una carta notarial, respondió un comunicado emitido por la Federación Peruana de Fútbol (FPF) el pasado 8 de marzo, mostrando su disconformidad a causa de algunos puntos de dicho oficio.
“Hemos recibido su respuesta a nuestra carta del 8 de marzo pasado. En ella hicimos de vuestro conocimiento que aceptábamos recibir a la empresa televisora que tiene contrato con ustedes para el partido del sábado 11, como en efecto ocurrió”, se lee en la primera parte de la misiva que emitió el elenco íntimo.
Alianza Lima añade que “les hicimos saber que lo hacíamos solo por respeto a nuestra hinchada, al público de todo el país que quiere ver a nuestro equipo y para evitar más perjuicios deportivos al club, pero dejamos sentado que ustedes vienen incurriendo en actos de abuso de poder y que oportunamente tendrán que dar cuenta de ello”.
Del mismo modo, la institución blanquiazul señala que “en su extraña carta señalan que “uno de los objetivos y fines de la FPF es elaborar reglamentos...”. Es una pena, pero debemos corregirlos: la Federación Peruana de Fútbol (FPF) no es una cámara legislativa para afirmar que su objetivo o fin es redactar reglamentos. A lo mucho se puede considerar que es una de sus funciones”.
En la parte final del comunicado, Alianza Lima confirma su postura y señala que “como producto de esa confusión, ustedes emplean innumerables citas legales para ‘confirmar’ que la FPF está facultada para realizar cambios en la normativa de los campeonatos y torneos locales. Suponiendo que las citas sean correctas, nos parecen impertinentes e inútiles”.
“Lo que nosotros afirmamos en nuestra carta del 8 de marzo pasado, es que ustedes no pueden darle eficacia inmediata a los cambios que se proponen a un torneo que ya se inició porque la posibilidad de producir perjuicios y beneficios a unos y a otros clubes es evidente, con el agregado que es una decisión antijurídica. Eso es todo”, agregaron.
Ante ello, la directiva del cuadro íntimo considera que “el fundamento legal que sustentó la reprogramación de nuestro partido del 25 de febrero, lo que confirma que la decisión solo se sustentó en el ejercicio arbitrario de una posición de dominio”
Finalmente, concluyen que, a través de este comunicado, esperan que las máximas autoridades del balompié nacional “aplaudan nuestro respeto al interés del club y de nuestra afición. No lo olviden: son las únicas razones por seguir cumpliendo vuestros ucases, a pesar de que no tienen fundamentos jurídicos ni éticos”.
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