Y así tenía que ser. Con la jugada que tantas veces hizo en los mundiales, Champions y todas las ligas más importantes del mundo. Ronaldinho se fue del Cusco con un 'pase del desprecio' impresionante que se convirtió en el 3-0 de Cienciano sobre Sporting Cristal.
A los 26 minutos del segundo tiempo, el astro brasileño tomó la pelota en la mitad de la cancha y mandó un pasesón, con la mirada hacía otro lado, hasta donde estaba ubicado Luis Castillo, quien no podía desaprovechar tremenda jugada y puso el tercero con un 'sombrerito'.
Después de esta brillante acción que puso de pie a todo el Garcilaso de la Vega, Ronaldinho dio por terminada su participación en la 'Tarde del Papá' y fue cambiado en medio de la algarabía.
A pesar de no anotar, la 'Sonrisa del fútbol' le regaló al Cusco una tarde que se llevarán consigo toda la vida. Harta mágia y, sobre todo, felicidad para el corazón. ¡Gracias Ronaldinho!
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