Una de las decisiones que cambió la vida de Hugo Sotil fue llegar al FC Barcelona en los años setenta. El exjugador peruano se convirtió en blaugrana después de brillar en Deportivo Municipal y en la Selección Peruana, y con trabajo y esfuerzo se ganó un nombre en la historia del club español. Es considerado como una leyenda del Barça y la institución no dudó en pronunciarse este lunes tras el fallecimiento del ‘Cholo’ a los 75 años. El cuadro azulgrana se despidió del aquel jugador hábil y valiente que ayudó a ganar la Liga de 1973-74 luego de 14 años de sequía.
Barcelona, que había rendido homenaje a la leyenda de la Selección Peruana en el pasado mes de noviembre, compartió un comunicado en el que lamentó la muerte de Sotil. “El FC Barcelona lamenta la muerte de Hugo Sotil, jugador azulgrana entre el 1973 y el 1976, y quiere expresar su pésame a la familia y amistades”, señaló el club de Cataluña.
Luego, aseguró que el talento y trabajo de Hugo hicieron que los hinchas blaugranas quedaran enamorados para siempre del ‘Cholo’. “Nacido en Ica (Perú) el 18 de mayo de 1949, fue considerado uno de los mejores jugadores sudamericanos de su tiempo. El popular ‘Cholo’ robó el corazón de los aficionados azulgranas de su época. Delantero hábil, escurridizo, valiente e intuitivo, su juego siempre era sinónimo de espectáculo”, agregó.
Sotil dejó una huella imborrable en el FC Barcelona con sus goles y su garra, en especial en la temporada 1973-74, en aquella memorable Liga en la que el club se proclamó campeón en El Molinón. Hasta ahora se recuerda su frase “Mamita, campeonamos” en el mundo del barcelonismo. En aquella campaña jugó al lado de leyendas como Johan Cruyff, Juan Manuel Asensi y Carles Rexach.
“Todo el mundo recuerda esa entrañable anécdota sucedida cuando el Barça ganó la Liga en el Molinón. Aquel 7 de abril de 1974, Hugo Sotil llamó a su madre desde los vestuarios para decirle una frase que pasó a la historia culé: ‘¡Mamita, campeonamos!’”, rememoró la institución blaugrana.
Hugo Sotil se fue del Barcelona en 1976, pero jamás imaginó que el cariño que le tiene el club y los hinchas sería para la eternidad. “Desde que me fui del Barça estaba esperando ese momento. Me gusta Barcelona, la amabilidad de sus gentes, el cariño de su afición”, dijo en 1984 cuando el Barça le rindió un homenaje con un partido de veteranos entre el equipo de 1974 y una selección sudamericana.
Unas décadas después, en 2014, el ‘Cholo’ volvió a profesar su amor por el club azulgrana. “Todo ese cariño que me brindó la gente del Barça no puede olvidarse. El día que me muera, espero que me entierren con la camiseta del Barcelona”, comentó. Cabe mencionar que el pasado mes de noviembre Sotil visitó las instalaciones del club en el marco de los 125 años del Barcelona, y volvió a recibir un homenaje.
Desde pequeño, el nacido en Ica mostró una pasión por el fútbol y ese fue el motivo por el cual su familia se mudó a Lima en busca de más oportunidades. Hugo Sotil, debido a su talento, integró las divisiones menores de Alianza Lima, pero con el paso del tiempo mejoró y pasó a las filas de Deportivo Municipal, institución donde debutó profesionalmente en 1968. Tenía un regate excepcional y una visión de juego única. Ese mismo año marcó 14 goles y ayudó al ‘Muni’ a lograr el ascenso.
En su primera etapa en Municipal, desde 1968 hasta 1972, anotó un total de 61 goles. Luego fue comprado por el FC Barcelona, uno de los clubes más importantes del mundo. El ‘Cholo’ dejó una huella imborrable en el Barça, siendo fundamental en la conquista de la Liga 1973-74, rompiendo una sequía de 14 años para el club. Su frase de aquel día aún se recuerda en Cataluña: “Mamita, campeonatos”.
En 1997, Hugo Sotil regresó al Perú para jugar en Alianza Lima, club con el que logró un bicampeonato (1977 y 1978). Finalmente, vivió una segunda etapa en Deportivo Municipal y jugó en otras instituciones como Independiente Medellín, Los Espartanos y Deportivo Junín. Su carrera en la Selección Peruana también estuvo repleta de éxitos. Participó en los mundiales de 1970 y 1978, siendo pieza importante en el ataque. Y su logro más destacado fue la Copa América de 1975, donde él anotó el 1-0 definitivo ante Colombia.