Prometimos no hacer un drama si el resultado no nos acompañaba y no lo haremos. Anoche Ecuador nos ganó con autoridad un partido de preparación. Nada más. Si uno pudiera elegir qué duelo perder, seguro escogería un amistoso como éste, a siete meses de la Copa América, nuestro próximo compromiso oficial. Una lástima, eso sí, aguarle la fiesta a los miles de aficionados que acompañaron al equipo de todos en el publicitado ‘día del hincha’.
Pero Ecuador se apertrechó y resistió bien el primer tiempo, que Perú controló sin profundidad, y en el segundo tiempo salió decidido a aprovechar las ventajas que le concedimos. Nos pasó factura la escasa continuidad de jugadores como Christian Ramos, Miguel Trauco, Renato Tapia y el propio Edison Flores. Otros, como Luis Advíncula, Yoshimar Yotún y Raúl Ruidíaz no trascendieron y ayer tuvieron, como cualquier mortal, una noche para el olvido.
En su partido 51 –igualando la marca del legendario Marcos Calderón– al frente de la selección, Ricardo Gareca no la pasó bien y perdió el duelo ante ‘Bolillo’ Gómez. El Tigre no encontró respuestas en las variantes que ensayó. Jefferson Farfán y Cristian Benavente estuvieron poco finos, y echamos en falta a Christian Cueva, el gran ausente en esta convocatoria. Pero ése era el riesgo y si había algún momento de asumirlo, era éste.
El martes toca levantarse ante Costa Rica en Arequipa. Este equipo tiene calidad, solvencia y un técnico de capacidad comprobada. No perdamos la calma, entonces, y démosle crédito, que aún tenemos tiempo para corregir errores y retomar el camino que nos llevará a la Copa América 2019 y las eliminatorias a Qatar 2022.
Escribe: Guillermo Denegri
NO DEJES DE VER