En un país que respira y suda rugby por millones, el fútbol comenzó a ganar espacio, de la mano de un técnico que ama la filosofía de Marcelo Bielsa y busca colocar a Nueva Zelanda en su tercer Mundial.
Aquí una mirada al próximo rival de Perú.
Su entrenador
Es todo un personaje. Se llama Anthony Hudson (hijo de la ex estrella del Chelsea, Alan Hudson). Solo tiene 36 años. Es de Estados Unidos y fue futbolista hasta los 27 años. Una lesión lo alejó de las canchas, pero no de las pizarras. Tomó las riendas de Nueva Zelanda en el 2014. Fue campeón de la Copa de las Naciones en el 2016, bajo la filosofía del ‘bielsismo’.
Por supuesto, se declaró un fanático de Marcelo Bielsa y de Jorge Sampaoli. Evidentemente, es un fiel admirador del fútbol chileno. Y, según dice, aprendió a hablar español debido a que pasa tiempo escuchando las conferencias de prensa de ‘El Loco’. Eso sí, cuando sale a correr, con los audífonos de siempre, no se pierde ni una charla del argentino.
“La pasión, su mentalidad fuerte, habilidad, velocidad….y siempre quieren ganar, siempre juegan con valor y agresividad. Eso es el por qué amo a Chile más que todo en el mundo del fútbol”, reveló Hudson a La Tercera.
¿Su sueño? Dirigir en Sudamérica y hacer historia en un fútbol más duro del mundo. Si es en la liga chilena, mejor.
Su capitán
Se llama Chris Wood. Tiene 25 años de edad y marcó 7 tantos en las Eliminatorias. Actualmente, el delantero juega en la Premier League. Su equipo es el Burnley, donde marcó 2 goles en 6 partidos disputados. Debutó con un gol ante Tottenham y fue titular en el empate sorpresivo que sacó su club en la casa de Liverpool. En resumidas cuentas, el artillero, que mide más de 1.91 cm, todo lo ve gol.
En el mercado de pases, Wood está tazado en casi 8 millones de dólares, según indica Transfermarkt. Y claro, es el flamante fichaje de Burnley, que marcha sexto en La Liga inglesa. ¿Cuánto costó? 18 millones de dólares fue lo que desembolsó el club al Leeds United, de la segunda división, para soltar a su estrella que marcó 30 goles en casi 44 partidos.
De esa manera, Wood se convirtió en el futbolista mejor valorado de la actual plantilla de Nueva Zelanda. A esto se suma un antecedente importante: es el neozelandés más joven en jugar un Mundial. Tenía apenas 18 años en Sudáfrica 2010. Mucho ojo con el movimiento del ‘9’, Perú.
¿Cómo llegó al repechaje?
De nueve partidos disputados, Nueva Zelanda no cayó en ninguno. Ganó 7 y empató en dos ocasiones. De hecho, es un equipo que se acostumbró a ganar por amplias diferencias. Por ejemplo, goleó en su debut por 3-1 a Fiyi. Luego, le hizo cinco a Vanuatu y selló su pase con un 6-1 a Islas Salomón.
¿Cómo juega?
A los largo de las Eliminatorias, Nueva Zelanda evidenció sus ganas de defender con solvencia con cuatro hombres bien parados en el fondo y alimentado hasta por tres volantes, cuyo trabajo se enmarca en salir jugando con el balón al piso.
A pesar de sus limitaciones para generar fútbol, el equipo de Anthony Hudson ataca siempre hasta con tres hombres. Con dos extremos y un punta. Y es aquí donde sus individualidades trascienden, como la de su capitán Chris Wood, a quien buscan con frecuencia para que se las arregle ante los defensas.
Evidentemente, en ofensiva, genera volumen para intentar hacer daño, pero descuida un poco el medio campo para recuperar rápido. De hecho, a sus volantes les cuesta hacer el recorrido.
¿Otra de sus armas? El balón parado. Esta selección se caracterizó por trabajar bien este aspecto. De esta manera, logró marcar cerca de 4 goles en las Eliminatorias. ¿Su ejecutor natural? Michael McGlinchey, el volante de 30 años que milita en la liga de Nueva Zelanda.
El arquero, un conocido de Perú
Es amigo de Yordy Reyna en el Vancouver Whitecaps de Canadá. Se llama Stefan Marinovic. Tiene 26 años de edad, y su carrera la consolidó en el fútbol alemán, pero en la segunda división. Por eso, cansado de no tener el protagonismo, se mudó a la Liga de las Estrellas.
¿Cuánto vale su plantilla?
Nueva Zelanda se ubica en la posición 113 del ranking FIFA, y su precio en el mercado de pases es de casi 25 millones de dólares; es decir, casi 10 millones menos que la de Perú.
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