Equipo que no gana, se cambia. Se ajusta y, como consecuencia, se tiende a ser más obsesivo en cuidar los detalles que pueden costar una derrota, como la que protagonizó Perú ante Bolivia en La Paz. Ricardo Gareca sabe que ante Ecuador en Lima no están permitida la derrota. Ya no. Al menos por actitud profesional.
Una cosa es enfrentar a Bolivia en la Paz con jugadores con oficio en la altura como César Ortiz, Pedro Aquino, Irven Ávila, Raúl Ruidíaz, por ejemplo. Y otra muy distinta es chocar con los mismos en Lima ante Ecuador. Por eso, el replanteo de Ricardo Gareca, en ofensiva, debería girar en torno al regreso a la titularidad de Paolo Guerrero, Joel Sánchez y Edison Flores – solo algunos por citar-.
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Guerrero, Sánchez y Flores, con su ingreso en el segundo tiempo ante Bolivia, le inyectaron jerarquía y más valor ofensivo a la Selección Peruana. Con ellos, Perú llegó más y propuso mejor. Ante Ecuador ya deberían haber arreglado su situación con el gol.
Luis Abraham, en defensa, dejó más dudas que respuestas. El de Sporting Cristal no precisamente apagó incendios como la mejor versión de Alberto Rodríguez. Por eso, Renato Tapia, de roce europeo, encajaría en una zaga que se conoce desde la Copa América Centenario (Christian Ramos, Miguel Trauco y Aldo Corzo).
No es un secreto a voces que Yoshimar Yotún y Miguel Araujo pertenecen al universo de gusto de Ricardo Gareca. Todos son ellos son opciones. El 'Tigre' tiene la decisión final.
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