Una fecha para la historia. El 2 de junio de 1970, La Selección Peruana jugaba por segunda vez en un Mundial y debutó de la mejor forma: tras estar abajo 2-0, remontó y selló un triunfo por 3-2 ante Bulgaria. Este fue, además, nuestra primera victoria en la Copa del Mundo, tras perder dos partidos en 1930. Han pasado 50 años y, más allá que quienes lo vieron lo recuerden como si fuera ayer, el fútbol ha ido cambiando en todo este tiempo.
Por ejemplo, ahora estamos acostumbrados a ver a Paolo Guerrero como solitario delantero de la bicolor, pero en esa época, la línea de ataque estaba conformada por cuatro futbolistas. Además, Luis Rubiños, el arquero peruano, no usaba guantes para tapar. Imposible siquiera imaginar a Pedro Gallese sin esta indumentaria en las manos. El sistema táctico de los dirigidos por Didí aquella tarde en el estadio Nou Camp de León fue de 4-2-4. No es detalle menor que se jugó con solo una pelota.
Con Rubiños en el arco, como decía la canción, la línea defensiva de la Selección Peruana contaba con Eloy Campos por la banda derecha, Orlando de la Torre como central diestro y Héctor Chumpitaz, el capitán, como defensor zurdo. Nicolás Fuentes jugaba en la banda izquierda. A los 29 minutos, Javier Gonzales tomó el lugar de Campos, quien se lesionó. El exSporting Cristal, eso sí, era el encargado del juego brusco.
Ramón Mifflin, por izquierda, y Roberto Chale, por derecha, conformaban el medio campo peruano. En el ataque, Julio Baylón jugaba abierto por la derecha, Pedro ‘Perico’ León lo hacía más adelantado (punta de lanza), Teófilo Cubillas a su lado, unos pasos más atrás, y Alberto Gallardo lo hacía a la izquierda. Como veremos más adelante, hubo muchas asociaciones en ataque con Chale, mientras que Mifflin ayudaba al equipo en la zona posterior.
Las claves: Chale y Mifflin
Más allá de que solo eran dos volantes, el papel de Chale y Mifflin era importante en ofensiva y defensiva, respectivamente. Ya en los amistosos previos, se veía las asociaciones del mediocampista derecho con los atacantes. El ‘Niño Terrible’ apoyaba a la delantera bicolor, tanto que en las fotos previas de los partidos, posaba agachado junto a los cuatro atacantes. En algunos casos menores, apoyaba atrás.
Por otro lado, Ramón Mifflin apoyaba a la defensa, en especial tomando el puesto de Héctor Chumpitaz, quien solía jugar muy adelantado o apoyando la banda de Nicolás Fuentes. El ‘Cabezón’ era el primero que iba a la marca, pero en caso de no poder parar al rival, bajaba al área propia para seguir defendiendo. Muchas veces estaba en la misma línea posterior. Además, también jugaba por derecha en la mayoría de los casos.
Chumpitaz y Sotil, las figuras
Héctor Chumpitaz, el ‘Capitán de América’, se lució en aquella tarde de hace 50 años. ‘Chumpi’ era el defensor central por izquierda, pero también subía hasta el medio campo y mandaba pases largos precisos. Además, muchas veces tomaba el lugar de Nicolás Fuentes, Eloy Campos y Pedro Gonzales, cuando los atacantes búlgaros lo pasaban (En ambos casos, Mifflin tomaba su lugar). Se aprovechó su buen pie para anotar el empate bicolor de tiro libre. Estuvo preciso y era una adelantado en su posición.
Hugo Sotil ingresó a los 51 minutos por Julio Baylón, tomando su lugar como delantero por derecha, ni bien Bulgaria anotó el 2-0. El papel del ‘Cholo’ fue importante para la remontada peruana. Primero porque se movió un poco más libre en la cancha: empezó jugando muy abierto, pero en varios momentos entró por el medio de la cancha. Segundo, generó la falta para el tiro libre que acabó con el empate. Por último, desequilibró a la defensa búlgara, que hasta ese momento se mostraba muy ordenada.
Las asociaciones
No se menciona mucho, pero hubo una etapa en la ‘Era de Didí’ que Teófilo Cubillas jugaba en el lugar de Roberto Chale. Luego de su primer triunfo, el brasileño decidió que el ‘Nene’ se ubique arriba y el ‘Niño Terrible’ tome ese puesto. En varios pasajes de este partido, esto se hizo notorio con cambios de puestos entre ambos, entre otros. El ‘triángulo’, en este caso, se completaba con el ‘Jet’ Gallardo o ‘Perico’ León. En otros momentos, Chale y Cubillas jugaban en la misma línea.
Ya con Sotil en la cancha, Chale rotaba ese puesto con el ‘Cholo'. Si Sotil se asociaba con León y Cubillas, Chale se abría por derecha y viceversa. Otras asociaciones que se vieron en la cancha son la de Mifflin con los centrales, Fuentes con Gallardo y dos de cuatro delanteros retrocediendo para apoyar a la marca.
Nuestros goles
Para empezar, Perú había hecho sus dos cambios al momento de estar 2-0 abajo en el marcador, ambos de dos jugadores por derecha: Gonzales en la defensa y Sotil en el ataque. Al minuto 50, Chumpitaz recupera un balón lanzado por Popov en la banda derecha, Chale lo toma por el medio y se lo pasa a Cubillas. El ‘Nene’ avanza hasta el área, le entrega la pelota a León, quien la cede a Gallardo, abierto por izquierda. El ‘Jet’ dispara y anota un golazo.
Fue justamente una combinación entre León y Sotil en el medio, que obligaba a Cubillas a abrirse un poco más, que generó la falta del segundo gol peruano. Ya con el ‘Cholo’ en la cancha, Bulgaria perdió su orden en la zona defensiva. Chumpitaz marcó el empata, incluso resbalándose al disparar. En el momento que los europeos ordenaban su barrera, tres futbolistas peruanos se pusieron al lado para, con éxito, distraer sus movimientos.
Finalmente, al minuto 73′, Campos recoge un balón mal lanzado por el arquero búlgaro y rápidamente se lo pasa a Mifflin, quien estaba en medio del campo. El ‘Cabezón’ se lo entrega a Cubillas, hacen una pared, para que el ‘Nene’ entre al área y anote un golazo. Una jugada totalmente de asociación táctica acabó en la remontada bicolor.