El pasado 9 de diciembre de 2021, la vida de Carmen Salinas se apagó a los 82 años a causa de un derrame cerebral dejando un gran vacío en el mundo del entretenimiento y sus millones de seguidores en diversas partes del mundo, pero quienes resultaron muy afectados, además de sus seres queridos, fueron los integrantes del elenco de “Mi fortuna es amarte”, la telenovela en la que participaba la reconocida actriz y que no llegó a concluir.
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En dicho melodrama, la también empresaria teatral mexicana daba vida a Doña Magos, pero tras su fallecimiento fue reemplazada por María Rojo. Debido a que la noticia de su muerte sorprendió a todos, te contamos el momento en el que los actores de la novela, emitida por Las Estrellas, se enteraron de su partida.
Como se sabe, Salinas tenía una trayectoria artística de 68 años que le valieron para convertirse en uno de los personajes más queridos no solo de México, sino de varios países de Latinoamérica, donde disfrutaron de sus grandes interpretaciones. Si bien, se desarrolló en televisión en diferentes melodramas, también estuvo en el cine y teatro, siendo conocida por su obra “Aventurera”.
EL ELENCO DE “MI FORTUNA ES AMARTE” SE ENTERA DE LA MUERTE DE CARMEN SALINAS
Según narró David Zepeda, protagonista de “Mi fortuna es amarte”, él junto a Susana González y Carmen Salinas se habían reunido un lunes (8 de noviembre) para ver el estreno de la telenovela.
“[Carmelita] estaba bien; y de repente llegó el miércoles y nos enteramos de que estaba hospitalizada”, contó el actor de Vicente ‘Chente’ Ramírez Pérez, quien recordó que a las semanas de estar internada murió.
Y aunque dejó un dolor muy profundo en él y sus compañeros, las enseñanzas que les dejó lo reconfortan. “Hay mucho que aprender [de Carmen], ayudaba al que no la estaba pasando bien, siempre llegaba de buen humor, nos hacía reír con chistes pintorescos”.
Pese a que su presencia física no está entre ellos, el histrión señaló que ella sigue acompañándolos en todo momento.
“[La historia] está contada de una manera muy fresca y muy ágil. Lo más difícil y divertido al mismo tiempo era grabar cuando participábamos todos los personajes; hubo grabaciones en donde estábamos 30 actores en escena más 200 extras, en estos tiempos de COVID, más los camarógrafos y el equipo de producción. Era una revolución de energía. Una escena a veces se llevaba tres o cuatro horas”, señaló sobre su trabajo en la producción de Nicandro Díaz González.