¡Un duro camino hasta la fama! Todos conocemos a la carismática Wendy Guevara, una de las participantes más queridas de “La Casa de los Famosos México”. Su presunto romance con Nicola Porcella o sus divertidas apariciones en pantalla hacen que la influencer transgénero sea de las más aclamadas por los seguidores del formato de competencia. Eso sí, debemos señalar que la mexicana de 29 años tuvo que luchar bastante para llegar al lugar en donde está en la actualidad.
En “La Casa de los Famosos México” estamos viviendo una etapa de revelaciones, secretos y demás. Resulta que durante los últimos episodios pudimos oír atentamente algunos detalles de la vida de la influencer Wendy Guevara en la dinámica “La vida en fotos”, y vaya que nos conmovió de sobremanera.
Fue en esa sección que oímos que Guevara narró en primera persona los episodios de violencia que vivió en su hogar debido a su identidad sexual. Contrariamente a lo que muchos piensan, no todos lograron aceptarla tal y como es, pese a que compartían lazos sanguíneos.
Al iniciar el segmento del programa pudimos ver que Wendy sostenía una fotografía suya junto a sus primas y su hermano mayor. En ese instante, la también empresaria señaló que era este último quien sufría las burlas por su culpa.
Es más, Wendy contó que solía jugar con accesorios de mujer a escondidas del resto, ya que tenía prohibido tales prácticas por parte de su padre. “Con mi prima yo jugaba a las muñecas, pero todo era a escondida, porque mi papá me golpeaba por mi manera de pensar y mi hermano le chismeaba a mi papá: ‘Luis anda jugando con las muñecas’ y ya cuando iba me daban mi buena surtida. Mi hermano es el más grande y por mi culpa la gente se burlaba de él y le decían cosas. Entonces siempre eran golpes de mi papá y mi hermano porque hubo un momento en el que se avergonzó de mi por mi forma de ser”, narró en medio de lágrimas.
Felizmente para Wendy, ella llegó a tener una aliada durante su juventud, en especial, luego de haber descubierto su verdadera identidad sexual. Fue así que contó que decidió trabajar ni bien cumplió los 16 años en la estética de su tía.
De hecho, la integrante de Las Perdidas reveló que esos tiempos de trabajo fueron los más felices de su vida, pues podía ser libremente quien era en realidad al no tener miedos ni prejuicios en su contra.
Este familiar era su tía Verónica, una de las personas que mayor confianza le brindó a lo largo de su vida. Fue tan decisiva en su camino que la motivó a seguir adelante y darle las fuerzas necesarias para llegar a ser la celebridad que es hoy en la actualidad.
No cabe duda de que Wendy es un ejemplo de superación, lucha, coraje y hasta de entrega a los sueños. Mucha suerte en “LCDLF México”.
Contenido GEC