Una ilusión óptica se ha vuelto tendencia en más de una red social al poner a prueba tus sentidos de una forma muy original. Se trata de un test visual en el que, con suma sinceridad, tienes que responder cuál es la figura que se te presenta a la primera. ¡Solo en Depor podrás encontrar más notas similares y otros contenidos de entretenimiento excepcionales!
“Dependiendo de cómo funcione tu cerebro (izquierdo o derecho), verás un gato o un alce en este patrón. Cualquier animal que veas no es parte de la imagen, es solo una ilusión óptica creada por tu propio cerebro. Si te acercas a cualquiera de las características, la ilusión desaparece”, señala Tom Hicks, difusor de la ilusión óptica, en Twitter.
En redes sociales, los resultados disímiles de la ilusión óptica hicieron que los internautas esbozaran distintas conclusiones sobre por qué vieron tal o cual animal. Si bien la mayoría vio a un gato, otros no vieron ni al alce ni a ninguna otra criatura y unos pocos solo lograron divisar algo al cerrar un ojo y ver la ilustración desde cierto ángulo.
Para que veas que no estamos jugando con tu mente, el resultado depende de la lateralización hemisférica, lo que significa que uno es más propenso a ver a cierto animal basándose en si usa más el lado izquierdo o derecho del cerebro. Como siempre, en la parte final del texto te ofrecemos la respuesta detallada de esta singular ilusión óptica.
Si llegaste hasta esta parte, quiere decir que te diste por vencido al intentar adivinar qué animal se muestra en la ilusión óptica, por lo que aquí te ofrecemos la solución. Como mencionamos, si usas el lado izquierdo o derecho del cerebro, no se ha revelado qué animal se refiere a qué lado, señala el diario británico Daily Mail.
Los pensadores del hemisferio izquierdo son más lógicos, analíticos y los del hemisferio derecho son más creativos e intuitivos. La teoría psicológica de la lateralización hemisférica dice que las funciones son realizadas por distintas regiones del cerebro, sin embargo, la idea de que los humanos tienen un lado izquierdo o derecho más fuerte ha sido refutada.
De acuerdo al sitio web oftalvist, una ilusión óptica es una imagen que engaña a nuestro sistema visual, desde el ojo al cerebro, llevándolo a percibir la realidad de forma distorsionada. Pueden suceder de manera natural o ser creadas por efectos visuales específicos, es decir, hacer que percibamos un objeto que no está presente, dando una imagen distorsionada de la realidad que percibimos.
Las ilusiones ópticas llevan a percibir la realidad de manera distorsionada a través de la vista. Pueden ser de carácter fisiológico, asociadas a los efectos de una estimulación de los ojos o el cerebro; o cognitivo, en la que interviene nuestro conocimiento del mundo, precisa el sitio web redalyc.org.
De acuerdo el sitio web computerhoy.com, la imagen engaña a nuestro cerebro a través del efecto Troxler, que hace que filtremos la información constante hasta que dejamos de percibirla. Como el cerebro no recibe información nueva, los estímulos en nuestra visión periférica adquieren la naturaleza del entorno que los rodea, que en este caso es un fondo blanco.
El cerebro necesita encontrar un significado y un equilibrio en todo lo que ve, y a todos los datos enviados por los sentidos. ¿Y qué ocurre cuando no encuentra una respuesta frente a una ilusión óptica? Pues el cerebro decide “reinterpretar los datos a través de sus propias estadísticas y, después de haber extraído la información disponible, llega a una conclusión”, detalla el portal español La Vanguardia.
Las ilusiones ópticas fisiológicamente ocurren durante la conexión del hemisferio derecho y el izquierdo del cerebro; gracias a esto tenemos la capacidad de percepción, que no es otra cosa más que la forma en la que interpretamos “las sensaciones que recibe a través de los sentidos para formar una impresión inconsciente o consciente (si se le puede aplicar discernimiento) de la realidad física de su entorno”. “También denominado como el proceso constructivo por el que organizamos las sensaciones y captamos conjuntos o formas dotadas de sentido”, detalla Wikipedia.
A menudo lo hace jugando con los colores y los contornos de las figuras para crear una falsa sensación de movimiento. De alguna manera, engaña a la vista porque transmite al cerebro una información que interpreta de manera confusa, señala el sitio web es.ara.cat.
De acuerdo al sitio web bbvaopenmind.com, su descubridor, Duncan Caldwell, propuso que se trata del caso más antiguo conocido de ilusión óptica, por su similitud con la ilusión del pato-conejo, un dibujo publicado en 1892 que suele citarse como uno de los ejemplos pioneros del moderno estudio de estos engaños visuales.
Un buen número de ilusiones visuales se basan en la necesidad que tiene nuestro cerebro de autocompletar la información que le falta. El origen de este fenómeno es complejo, pero puede deberse, entre otros motivos, a que la información que proveen nuestros ojos es interrumpida por los parpadeos, señala el sitio web mujeresconciencia.com.
De acuerdo al sitio web bibliotecadigital.econ.uba.ar, las ilusiones ópticas nos llevan a percibir la realidad de manera distorsionada a través del sentido de la vista. Pueden tratarse de carácter fisiológico, asociadas a los efectos de una estimulación de los ojos o el cerebro; o cognitivo, en la que interviene nuestro conocimiento del mundo.
Si partimos de la definición que provee el sitio web psiquiatria.com, en la ilusión se produce “una deformación de un objeto real externo, ya sea por una falta de atención, por determinados sentimientos que actúan catatímicamente deformando esta realidad o porque exista un deseo expreso de deformar este material real”.
Vinculada a los sentidos, una ilusión es una distorsión de la percepción, detalla el sitio web definicion.de. Puede hablarse de ilusiones ópticas, que son las más usuales; ilusiones olfativas, ilusiones auditivas, ilusiones gustativas o ilusiones táctiles.
De acuerdo al sitio web memoria.fahce.unlp.edu.ar, Griesinger designa las alucinaciones con el “nombre de imagenes de origen subjetivo que se proyectan al exterior y adquieren una objetividad y realidad aparente”, mientras que las ilusiones son para él, “el resultado de la alteracion de una imagen real mente percibida”.
Según el Fine Arts Center de Colorado College, existen cuatro tipos de ilusiones ópticas: ilusiones ópticas literales (que comúnmente se caracterizan por las imágenes posteriores después de ver luces brillantes), ilusiones ópticas fisiológicas e ilusiones visuales cognitivas (que son el resultado de nuestras conceptos y suposiciones sobre el mundo, las que imponemos a los estímulos visuales).
¿Qué son las ilusiones ópticas? Los humanos ven ilusiones ópticas cuando el sistema visual (ojos y cerebro) intenta interpretar una imagen que evoca una percepción que se desvía de la realidad. Su cerebro muestra una imagen que tiene más “sentido”, pero no siempre es lo que realmente está frente a nuestros ojos, detalla el sitio web misciwriters.com.
El arte de la ilusión óptica, más conocido como Op art, es una forma de arte abstracto que surgió en la década de 1960. Utiliza formas gráficas y bloques de colores para crear la ilusión de movimiento o profundidad, explotando las intrincadas formas en que el ojo humano percibe lo que vemos, detalla el sitio web blog.displate.com.
Uno de los mejores ejemplos de una ilusión fisiológica es Hermann Grid. Cuando miras directamente una Cuadrícula de Hermann, ves una cuadrícula blanca con cuadrados negros. Si mueve los ojos por el patrón, también verá puntos grises o manchas donde las líneas negras se cruzan entre sí, señala el Museo de Ilusiones de la Ciudad de Nueva York.
Una posibilidad es que la ilusión se genere en la corteza visual. Ubicada en la parte posterior de su cabeza, esta es la parte de su cerebro que procesa directamente la información que proviene de sus ojos, señala vox.com.
Contenido GEC