Actualmente, Saúl Álvarez es uno de los boxeadores mexicanos con más renombre en el deporte de contacto. Sin embargo, tuvo que trabajar duro para llegar a donde está hoy. Cuando comenzó en la disciplina, Canelo tuvo el apoyo de dos grandes televisoras nacionales: TV Azteca y Televisa; con esta última tuvo una relación de cuatro años que terminó abruptamente y con polémica.
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Aunque la carrera del púgil mexicano siempre estuvo ligada a Televisa, por el impulso que recibió durante los comienzos de su trayectoria, una fuerte pelea entre ambas partes terminó por enfurecer a Canelo Álvarez. ¿Qué pasó realmente y por qué años más tarde el boxeador no quiere saber nada con la cadena de televisión? A continuación, todos los detalles.
Corría el 2005 y en México, el nombre de Saúl Álvarez comenzaba a hacerse conocido en el mundo del boxeo local. Sus cualidades habían llamado la atención de todos, tanto que dos años después de iniciarse profesionalmente TV Azteca decidió apoyar su prometedora carrera. Por aquel entonces, la televisora del Ajusco había devuelto el box a la televisión abierta y era normal que buscaran nuevos rostros con los que la afición pudiera identificarse.
De la mano de TV Azteca la carrera de Álvarez comenzó a brillar, pero en 2010 el pugilista decidió mudarse con Televisa, que también había comenzado un proceso para darle difusión al box en todo el país. Canelo firmó entonces un contrato de exclusividad por cuatro años. Sin embargo, todo terminó de manera abrupta.
La revista TVNotas, que tenía el sello editorial de Televisa, publicó un reportaje sobre Javier Chatito Jáuregui, un ex boxeador que, según la información de la pieza, fungía como sparring del Canelo. En el informe, el medio señalaba a Álvarez como el responsable de la muerte de Jáuregui.
En el texto, cuyo título era “Canelo en llamas”, se mencionaba que el boxeador mexicano le había propinado a Jáuregui una golpiza que le provocó un derrame cerebral, lo envió al hospital y luego causó su muerte. “El excampeón Javier Jáuregui, sparring de Saúl Álvarez, perdió la vida tras las terribles golpizas que recibió durante los entrenamientos con el pelirrojo para su pelea contra el Perro Angulo”, publicó TVNotas en marzo de 2014.
La publicación no cayó bien en Canelo y su equipo, que finalmente decidió romper su vínculo laboral con la televisora. El 8 de abril de 2014, Saúl publicó en redes sociales el siguiente mensaje sobre su pelea contra Erislandy Lara: “Hasta el momento he decidido que no sea televisada por Televisa por cuestiones laborales y personales. Gracias por su apoyo y buscaremos lo mejor para ustedes y para mí”.
La decisión del boxeador fue respaldada por Chepo Reynoso, quien ese momento era su entrenador principal. “Saúl está muy resentido por algunas cosas que se dijeron y Televisa no lo cobijó. Una revista publicó unas cosas que no son ciertas, y es una revista que tiene el sello de Televisa. Eso causó malestar en todo el equipo. Es un sentimiento que tiene Saúl y nosotros lo apoyaremos porque tiene razón”, comentó Reynoso en una entrevista para Récord.
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