La autoestima es un componente esencial de nuestra salud mental. Afecta cómo nos vemos a nosotros mismos y cómo interactuamos con el mundo. Realizar un autoexamen como el que verás a continuación puede ayudarte a entender en qué nivel te encuentras y qué áreas podrías necesitar trabajar para mejorar tu percepción personal. Dicho esto, te comparto un test visual que te ayudará a descubrir en qué nivel se encuentra tu autoestima en este preciso momento de tu vida. Todo lo que tienes que hacer es observar la imagen principal de la nota y responder qué fue lo primero que viste: la rosa, la mano o una mujer. ¿Te animas a participar? Es importante recordar que esta prueba es solamente una herramienta para la reflexión, y no debe ser usado como un diagnóstico clínico.
Observa la imagen del test visual
Mira los resultados del test visual
Si viste una rosa...
- Esto indica que tienes una autoestima elevada y un amor propio profundo, lo cual refleja una dedicación constante al cuidado personal y la satisfacción de tus necesidades. Aunque esta actitud es positiva para el bienestar psicológico, puede conllevar un riesgo significativo. Aquellas personas centradas exclusivamente en sí mismas y en la realización de sus deseos pueden manifestar tendencias egoístas, careciendo de preocupación por los demás y mostrando resistencia a compartir.
Si viste una mano...
- Esto demuestra que posees un enfoque objetivo contigo mismo. Tienes la capacidad de analizar todos los aspectos de tu personalidad, desde tus fortalezas hasta tus debilidades, y sabes cómo brindarte el apoyo necesario en cada situación. Aunque tu autoestima podría no estar en su punto más alto, reconoces tu valía incluso con tus limitaciones. Esto refleja un sólido amor propio y un compromiso constante de vivir tu vida de la mejor manera posible. Muchos podrían aprender valiosas lecciones de tu actitud positiva hacia ti mismo.
Si viste una mujer...
- Esto sugiere una autoestima que podría no ser muy elevada. Con frecuencia, te encuentras en un segundo plano tanto en situaciones públicas como en relaciones amorosas o de amistad. No buscas ser el centro de atención, ya que no te consideras alguien digno de admiración o de ser observado por desconocidos. Esta tendencia puede llevar a evitar destacar en entornos sociales o a sentirte incómodo al recibir halagos o reconocimiento. Sin embargo, es importante recordar que la autoestima es algo que se puede trabajar y fortalecer con el tiempo y la práctica de la autoaceptación y el autocuidado.