La mitomanía, conocida también como pseudología fantástica, es un trastorno psicológico caracterizado por la tendencia compulsiva de una persona a mentir o exagerar hechos de manera habitual. Distinguir si uno mismo o alguien cercano sufre de este trastorno puede ser complejo, dado que la línea entre una mentira ocasional y un patrón de mentiras compulsivas puede ser difusa. A continuación, te comparto un test visual básico que puede ayudarte a identificar signos de mitomanía. Sin embargo, es importante recordar que esta prueba no reemplaza la evaluación de un profesional de la salud mental, por lo que te pido no tomarte los resultados enserio. ¿Te animas a participar? Para ello, todo lo que tienes que hacer es mirar la imagen principal de la nota y responder cómo son tus labios según las cuatro opciones que se muestran. ¡No dejes pasar esta oportunidad para conocerte!
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¿Tus labios se ven como la imagen #1?
- Eres una persona que no te gusta que te digan mentiras, pero no dudarás en engañar si sientes que la situación lo amerita. Además, en más de una ocasión tienes la intención de quedar bien frente a los demás basándote en falsedades. Es importante reflexionar sobre cómo estas acciones pueden afectar tus relaciones y tu propia integridad. Considera cómo la sinceridad y la honestidad pueden fortalecer tus vínculos y tu autoestima a largo plazo. Recuerda que la confianza es fundamental en cualquier relación, y construirla sobre cimientos sólidos de verdad te beneficiará tanto a ti como a quienes te rodean.
¿Tus labios se ven como la imagen #2?
- Te consideras una persona sincera, honesta y leal, por lo que siempre intentas que quienes te rodean sean iguales a ti. No toleras la hipocresía, así que si descubres un engaño, no dudas en alejarte rápidamente. Es crucial mantener tus estándares y rodearte de personas que compartan tus valores para construir relaciones sólidas y auténticas. Cultivar un entorno de confianza y transparencia te permitirá desarrollarte y prosperar en tus interacciones personales y profesionales. Recuerda que la coherencia entre tus acciones y tus principios es clave para mantener la integridad en todas tus relaciones.
¿Tus labios se ven como la imagen #3?
- De cierta manera, has normalizado las mentiras. Sabes que las personas pueden engañar y no temes a ello, pero en cuanto a ti, intentas ser transparente. Sientes que de esta manera ahorras tiempo y sentimientos. Sin embargo, es importante recordar que la sinceridad no solo beneficia tus relaciones, sino que también contribuye a tu propia paz mental y autenticidad. Cultivar la honestidad en tus interacciones no solo fortalece tus vínculos con los demás, sino que también te permite vivir en congruencia contigo mismo, promoviendo un sentido de integridad y bienestar emocional.
¿Tus labios se ven como la imagen #4?
- No vas por la vida mintiendo, sin embargo, no dudarás en engañar si así lo ves conveniente o por la necesidad de quedar bien parado ante algún problema. Recuerda que la integridad es fundamental para construir relaciones duraderas y para tu propio bienestar emocional. Mantener una actitud honesta y coherente con tus valores te permitirá cultivar la confianza y el respeto en tus interacciones con los demás, así como fortalecer tu autoestima y paz interior. Vivir de acuerdo con tus principios no solo beneficia tu entorno, sino que también contribuye a tu crecimiento personal y a una vida más auténtica y satisfactoria.