Argentina vs. Israel chocan en el estadio Teddy Kollek de Jerusalén el próximo sábado por la noche (9 de junio) en un duelo amistoso de preparación para el Mundial Rusia 2018 que ha despertado un gran interés entre los fanáticos israelíes, principalmente por la participación planificada de Messi.
Pero los palestinos no están felices de que el encuentro se celebre en Jerusalén y el jefe de la federación palestina, Jibril Rajoub, escribió la semana pasada a Claudio Tapia, jefe de la Asociación de Fútbol de Argentina (AFA), acusando a Israel de utilizar el partido como una "herramienta política".
El estadio donde se disputará el partido se encuentra en el lado oeste de Jerusalén. Los palestinos quieren que la parte este de la ciudad sea la capital de un futuro estado que incluya la Franja de Gaza y Cisjordania, ocupada por Israel. Sin embargo, el estatus de la ciudad es un tema muy delicado.
El partido estaba programado originalmente para ser jugado en Haifa, pero las autoridades israelíes contribuyeron con fondos para su traslado a Jerusalén, molestando aún más a los palestinos tras el reconocimiento del presidente estadounidense, Donald Trump, de esa ciudad como la capital de Israel. La embajada de Estados Unidos fue trasladada allí el mes pasado. "El Gobierno israelí ha convertido un partido deportivo regular en una herramienta política", dijo una parte de la carta de Rajoub.
Redacción Depor / Reuters