Cada vez que se despierta en las mañanas y se mira en el espejo, Cristiano Ronaldo piensa en solo una cosa para iniciar el día: “Soy el mejor del mundo”, se dice. Lo creyó cuando empezó a jugar desde niño en las calles de su natal Madeira para luego continuar con esa mentalidad ganadora en su paso por el filial del Andorinha FC. Se lava el rostro y dientes, desayuna según lo que diga su nutricionista y vuelve a apuntar: “Soy el actual Balón de Oro y FIFA The Best, el mejor jugador en la historia del Real Madrid y también en mi país. Gano millones en publicidad y las marcas más rankeadas quieren que sea su imagen. Ahora ganaré el Mundial Rusia 2018. ¿Por qué han de decir que otro es mejor que yo en este momento? ¿Cómo no me la voy a creer?”, añade.
Así es el pensamiento de ‘CR7’ y nada ni nadie se lo va a cambiar. En una columna en 'The Players Tribune' reveló que sus compañeros de equipos juveniles se burlaban de él cuando les contó esto. Sin embargo, ¿cómo no creer en algo que te da vuelta a la cabeza una y otra vez? ¿Cómo negarte a que lograrás lo que nadie pudo cuando tu fuerza de voluntad es más grande que todo?
Para sobresalir, a Cristiano nadie se la puso fácil, sobre todo porque no contaba con el apoyo de toda su familia cuando empezó como futbolista. Su padre era el que más creía en su potencial. De su mano lo llevó a probarse al Andorinha. “Siempre estaba ahí echándome ganas. Le encantaba, aunque a mi madre y hermanas en ese momento el fútbol no les interesaba ni un poco”, sostuvo.
Prometedor en Sporting Club de Lisboa, una realidad en Manchester United y ganador de todo en Real Madrid, el crack portugués tiene marcadas las palabras "esfuerzo" y "dedicación" en la frente desde que tiene uso de conciencia. “Es algo dentro de mí. Una sensación rara. Cuando pierdo siento que me estoy muriendo de hambre”. No ha sido ungido por los dioses para - en una cancha de fútbol - tomar la pelota, llevarse a cuatro rivales y marcar un golazo para quedar en la posteridad. No. Lo suyo no es eso. ¿Quieres convertirte en el mejor jugador del mundo? Pues perfeccionas tus habilidades. ¿Quieres llegar a lo más alto y ser considerado dentro del olimpo del fútbol? Pues cuando se hayan apagados las luces, cuando el utilero se haya ido, tú te quedas en el verde. Allí, como cuando solo entrenabas tiros libre en el United y Sporting cuando tus compañeros se encontraban de vuelta a casa.
Liderazgo para ganar dos Champions consecutivas, determinación para levantar la primera Euro con su país, perseverancia para soñar en grande y ser el máximo goleador en la historia merengue, y sacrificio para prescindir de su familia con el fin de lograr sus sueños son algunos de los valores que el fanático y amigo de Kevin Roldan, confeso hincha de Oasis y seguidor del DJ holandés Paul van Dyk nos ha mostrado el ‘Batipibe’, apodo que le puso el recordado narrador ‘Bambino’ Pons.
Se ve haciendo historia nuevamente con su cuarta orejona con Real Madrid, pero Cristiano Ronaldo ya tiene puesto su mira sobre Rusia 2018. En su mente se ve ganador de la cita mundialista, levantando la Copa en el Olímpico de Luzhniki, besándola y volviendo a Portugal para ser declarado héroe nacional por su hazaña. ¿Y es que hay alguien en el mundo capaz de refutarle que no ganará el Mundial? Nadie, ni su propia madre.