Franco Armani tenía 23 años y continuaba con la aspiración de jugar en un equipo de Primera División. Era el arquero del Deportivo Merlo en la Primera B de Argentina. La gira de un equipo extranjero marcó para siempre su carrera en el fútbol.
Sucedió en el año 2010, el Atlético Nacional realizaba una gira de pre-temporada por el país albiceleste. En uno de esos partidos de preparación enfrentaron al Deportivo Merlo. Como un presagio a sus actuaciones en Copa Libertadores, el portero Franco Armani tuvo una excepcional actuación. Convenció sin querer al cuerpo técnico del club colombiano.
El técnico de aquel entonces Ramón Cabrero notó sus condiciones. Su talento merecía ser mostrado en algún equipo grande. Así llegó al cuadro colombiano. Sin embargo, no era visto de buena manera por el hincha verdolaga. Su poca experiencia, pese a sus 23 años, no convencía al aficionado.
Del llanto a la admiración
Cuando llegó al aeropuerto de Medellín, nadie lo esperaba. Arribó como el quinto arquero del club. "Hacía turismo de día y de noche me la pasaba llorando. Jugué un solo partido a fin de año, fuimos a penales y no atajé ni uno", recordó Armani, hace algunos años, sobre su duro inicio en Colombia en el 2010.
Hasta el año 2012, el portero titular era Gastón Pezzuti, por lo cual, a Armani solo le quedó esperar su oportunidad. Tenía apariciones ocasionales, aunque sin resaltar. Las dudas y las críticas crecieron por parte de la prensa y la hinchada del cuadro de Medellín. Y para su mala suerte, una lesión sufrida en el partido de su equipo ante el Junior por la Superliga de Colombia, lo alejó de las canchas. Regresaría en abril del 2013.
El arquero peleaba el puesto de titular con Luis Enrique Martínez, portero contratado en reemplazo de Pezzuti. Lograba el campeonato y alcanzaba un récord de 1046 minutos sin recibir anotaciones en los cuatro torneos disputados por el Atlético Nacional (Apertura 2013, Clausura 2013, Copa Colombia y Copa Sudamericana).
Tras la irregularidad de Martínez en el arco, Franco Armani sobresalía y se convertía en figura de varios partidos con su club. El 20 de diciembre del 2015, ataja dos penales y logra salir campeón del Torneo de Finalización con el Nacional, tras vencer al Junior de Barranquilla. Con este título, no solo se convertía en figura de su club sino también en uno de los más admirados por el aficionado del Nacional.
La consolidación en América
Seis años después de aquel encuentro de pre-temporada en donde fue la figura con el Deportivo Merlo, Armani se convirtió en el salvador de su equipo en la Copa Libertadores 2016. El 'Verdolaga' ganó el máximo certamen de clubes de América frente a Independiente del Valle, en gran parte gracias a las grandes actuaciones de su portero.
River y la selección
Ocho años después de su salida en silencio de Argentina, River Plate se fijó en él. De hecho, peleó por él y finalmente terminó llevándolo por 3.8 millones de dólares, una de las ventas más caras del Atlético Nacional, quien apostó por el portero cuando era un verdadero desconocido y lo despidió como todo un héroe.
"River está contratando al mejor arquero que hay hoy en día en América Latina. Las condiciones que tiene este muchacho son inmensas", advirtió el histórico René Higuita el día que Armani se despidió de la afición 'Verdolaga'.
Y apenas con 29 partidos en el 'Millonario', 10 goles recibidos y un título ante Boca por la Supercopa de Argentina, Jorge Sampaoli dio el golpe sobre la mesa y lo metió en la lista de 23 convocados para Rusia 2018, donde apunta como titular de la 'Albiceleste' luego de que Sergio Romero quedara fuera por una lesión.