Una parte de la selección brasileña de fútbol desembarcó hoy en Río de Janeiro después de la eliminación en el partido frente a Bélgica en cuartos de final del Mundial de Rusia 2018.
Miembros de la comisión técnica y los jugadores Casemiro, Douglas Costa, Gabriel Jesús, Geromer, Philippe Coutinho y Taison llegaron este domingo al aeropuerto de Río de Janeiro en un vuelo procedente de San Petersburgo, que hizo una escala previa en Madrid.
Neymar, cuyo regreso era esperado hoy, no fue visto, mientras que el resto de jugadores regresó por cuenta propia o decidió permanecer en Europa.
Los jugadores fueron aclamados por un reducido grupo de hinchas que esperaban en el aeropuerto a primera hora de la mañana para dar la bienvenida a la "Canarinha", que el viernes perdió por 2-1 frente a Bélgica en cuartos de final.
Quien también recibió el apoyo de la afición fue el técnico Adenor Leonardo Bacchi "Tite", quien, según medios locales, habría recibido una invitación de la Confederación Brasileña de Fútbol para permanecer al frente de la selección.
"Tengo orgullo de poder transmitir alguna cosa buena. Solo (quiero) retribuir el cariño que nos están proporcionando. Quiero de corazón agradecer" a los aficionados, afirmó Tite, en declaraciones a medios.
Quien también conversó con la prensa fue Casemiro, que no jugó ante Bélgica al estar suspendido por acumular dos tarjetas amarillas.
"Hace dos años Brasil corría el riesgo de no clasificarse y ahora estamos como favoritos. Hay muchas cosas buenas, no es el fin de una era. Tenemos que valorar", subrayó el jugador del Real Madrid, quien defendió la permanencia de Tite como seleccionador.
El volante también salió en defensa del centrocampista Fernandinho, autor del autogol para el 1-0 en el Brasil-Bélgica.
"Cuando pierde, pierde todo el mundo; cuando gana, gana todo el mundo. Tuvo mala suerte en la jugada, pero en los otros partidos demostró su disposición. Es un gran jugador, todos confiamos en él, pero es fútbol", sostuvo.
Fuente: EFE