"Lionel Messi no va a estar solo en el césped", afirma el portero francés Steve Mandanda, convencido de que Francia cometería un error si centrara toda su atención en el 10 de Argentina en el duelo de octavos de final del Mundial Rusia 2018 del próximo sábado.
"No hay forma de pararlo si tiene un día bueno, pero creo que la receta pasa por defender compactos, con las líneas juntas", agrega el veterano guardameta del Marsella, que probó el amargo sabor de Messi en el último Francia vs. Argentina hace 10 años.
El Velódromo de Marsella acabó coreando el nombre de Messi en aquella ocasión, el segundo partido en el banquillo de Diego Maradona, que ganó crédito y derrotó a una selección francesa dirigida por Raymond Domenech y bajo cuyos palos estaba Mandanda.
Pese a que no suele ser titular -contra Dinamarca debutó en un Mundial a sus 33 años-, su experiencia le convierten en una de las voces más escuchadas en el vestuario francés y su mensaje es claro: no hay que considerar que Argentina es solo Messi.
"Es uno de los mejores del mundo y el mejor de Argentina, es normal que se hable mucho de él. Pero no es el único. El peligro puede venir por muchos lados", afirma el jugador.
Presnel Kimpembe también debutó ante Dinamarca en un Mundial. Consultado sobre Argentina, el defensa de Francia también se mostró cauto. "Es cierto que no han hecho un buen inicio de Mundial, pero son una gran nación y tienen jugadores de gran calidad. No nos podemos confiar".
"Sabemos que hasta ahora no hemos hecho un gran fútbol y que para ganar tendremos que elevar nuestro nivel. Pero también es cierto que hemos jugado contra equipos que se cerraban atrás y esperamos que contra Argentina será un partido más abierto", agregó.