Cedric Soares alabó a la selección de Uruguay, pero también aseguró que Portugal tiene sus armas y que tratará de aprovecharlas el sábado en Sochi, en el partido de octavos de final de Rusia 2018.
"Uruguay tiene excelentes jugadores. Es una selección que ya fue campeona del mundo dos veces. Sabemos que no han perdido ningún partido ni ha encajado gol alguno", señaló.
Cedric advirtió, no obstante, que el conjunto que dirige Óscar Washington Tabárez debe preocuparse por Portugal, que tiene sus "armas" y cuyos jugadores, dijo, confían mucho en ellos. "Vamos a tener tiempo durante esta semana para preparar el partido de la mejor forma", apostilló.
A pesar de las críticas recibidas por el juego, el defensa del Southampton mostró el sentir de la plantilla de que "la fase de grupos está siendo difícil para todos, muy competitiva", con lo que aseguró que habían cumplido el primer objetivo de alcanzar los octavos de final.
Cedric apostó, al respecto de la necesidad de jugar mejor, por ser práctico: "Lo más importante es vencer los partidos".
"Ahora lo importante es enfocar el próximo adversario, que tiene una gran selección, pero nosotros somos campeones de Europa, ya demostramos muchas veces nuestra calidad y vamos a continuar haciéndolo", dijo en el cuartel general de Kratovo, en las afueras de Moscú.
"Tenemos nuestra estrategia para vencer. Bonito o feo son análisis vuestros (de los periodistas). Lo importante es vencer. Frente a Uruguay tenemos que estar siempre atentos", señaló Cedric, quien manifestó que "a partir de ahora son todo finales y hay que encararlas de esa manera".
No quiso criticar el hecho de que ante Irán se señalara, a través del VAR, un penal por mano suya porque "no se puede estar más preocupado por decisiones que ya no se pueden cambiar o que no se pueden controlar".
Tampoco quiso referirse a las críticas tras el encuentro de Carlos Queiroz, exseleccionador portugués y técnico de Irán, y afirmó, respecto a su acción de la pena máxima, que cuando trató de controlar el balón en el salto con un rival, este le cargó y el balón lo único que hace es rozarle simplemente, con lo que le pareció la decisión "exagerada". EFE