El nuevo coronavirus viene ganando terreno en el mundo. Los países se han puesto en alerta ante el inminente avance de la pandemia global. Al día de hoy, el covid-19 ha contagiado a más 340.000 en los 178 países del mundo. Fuera de China, país donde se originó la cepa, Italia es el país con más casos, seguido de Estados Unidos y España.
Cada día que pasa, aumenta la cifra de contagiados y fallecidos por coronavirus en el mundo; por ello, muchos gobiernos han desplegado medidas más drásticas en sus territorios para combatir el avance del nuevo virus.
Italia, el país más golpeado por el covid-19, inició el proyecto que sigue el modelo de Corea del Sur, para frenar el virus. Estas incluyen una serie de medidas sanitarias y de operaciones tecnológicas.
“Adoptamos la estrategia coreana; se harán más test sobre el coronavirus [hasta ahora se hacían solo a las personas que tenían síntomas]. En Italia hemos hecho ya más de 200.000 pruebas. El modelo coreano no persigue hacer test a todos sus 50 millones de habitantes; Corea del Sur ha hecho 300.000, pero seleccionados, a las personas relacionadas con pacientes positivos. Es justamente aquí donde nosotros también vamos a insistir”, explicó Walter Ricciardi, principal asesor del Gobierno italiano en la lucha contra el nuevo coronavirus.
¿Cómo ha reaccionado Corea del Sur ante la epidemia del coronavirus? De acuerdo a la BBC “Corea del Sur adelantó una campaña agresiva para combatir el virus. Puso todo su sistema de salud a disposición para diagnosticar tempranamente la presencia del covid-19 en los habitantes de zonas críticas del país”.
El 20 de enero, cuando Corea del Sur confirmó su primer caso de coronavirus, su sistema de salud detectó que el origen de la epidemia en el país era la ciudad de Daegu, en el norte, donde se han presentado tres cuartos de los casos totales en Corea del Sur.
Entonces, iniciaron con el trabajo de frenar el avance. La estrategia, coordinada por el Ministerio de Salud surcoreano, fue: una amplia red de diagnóstico y la reducción de la tasa de mortalidad como objetivo.
El ministro de Salud de Corea del Sur, Park Neunghoo, señaló que “detectar el virus en sus etapas más tempranas es fundamental para poder identificar a las personas que lo tienen y de esa forma poder detener o demorar su expansión”. Asimismo, añadió que, en el caso del nuevo coronavirus, esta medida “nos ha permitido también planear adecuadamente la atención en salud, debido a que solo el 10% de los contagiados requiere hospitalización”.
A diferencia de otros países, donde solo se hacen test a quienes tienen síntomas, Corea del Sur realizó desde el primer día el test de descarte de coronavirus a todo el que haya estado en contacto directo con casos confirmados. En lugar que el paciente se acercara a los centros de salud, el gobierno coreano decidió ir por ellos, buscando en las ciudades posibles infectados para evitar que contagiaran a la comunidad.
Además, una vez que se detectó el primer caso (en Busan, la ciudad más grande del país) el Gobierno ordenó el cierre de bibliotecas públicas, instalaciones para adultos mayores, competiciones de caballos, etc.
También se colocó dispensadores de desinfectante en los lugares más concurridos y se le tomaba la temperatura a viajeros y posibles contagiados que se movieran por zonas de riesgo.
Finalmente, se creó una aplicación móvil que geolocalizó a personas infectadas para que otros pudiesen ver dónde se encontraban los principales focos del covid-19.
Esta última medida fue criticada en el país; pero el viceministro de Salud, Kim Gang-lip, defendió la creación de esta app. “Sin dañar el principio de una sociedad transparente y abierta, recomendamos un sistema de respuesta que combine la participación pública voluntaria con aplicaciones creativas de tecnología avanzada”, dijo.
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