El reconocido actor de Broadway, Nick Cordero vive un drama desde que le detectaron COVID-19 hace más de tres meses. Cordero no solo pasó más de cuarenta días en un coma inducido, sino que por complicaciones en su salud se le amputó la pierna derecha y ahora necesita de un trasplante doble de pulmones.
Cordero, nominado al premio Tony, fue internado en marzo en un hospital en Los Ángeles (Estados Unidos) y desde ese momento es su esposa, Amanda Kloots, quien ha contado a los medios la evolución del actor.
Si bien el artista despertó del coma hace más de un mes y dio negativo en el test de coronavirus, las secuelas que ha dejado la enfermedad en su cuerpo son bastantes graves. “Existe una probabilidad del 99% de que se necesitaría ese trasplante de pulmón para vivir el tipo de vida que sé que mi esposo querría vivir”, señaló Kloots en una entrevista a “CBS This Morning”.
Kloots relató también que en cuatro ocasiones los médicos le afirmaron que Cordero no iba a sobrevivir a todo el proceso, pero aún así el actor pudo seguir adelante tras la amputación de su pierna derecha.
Por el momento, se conoce que el actor aún no puede moverse y no habla, solo gesticula algunas palabras. “Todos los días antes de irme, le digo: ‘bien, esto es en lo que debes concentrarte. Los dos sentados en nuestra nueva casa, Elvis (su bebé) está en la cama y estamos escuchando ‘Our home’ en nuestra casa”, afirmó.