Una imagen repetitiva: la razón por la que echar boca abajo a un paciente de COVID-19 está salvando muchas vidas

La crisis respiratoria es uno de los factores que lleva a un paciente de coronavirus hacia la muerte y este método es de máxima ayuda.
Un mejor flujo de aire y sangre: las razones por la que echar boca abajo a un paciente de COVID-19 está salvando muchas vidas. (Getty)

Muchas han dado la vuelta al mundo, donde una se volvió repetitiva y despertó la curiosidad de cientos de personas. ¿?

Uno de los principales factores que lleva a un paciente de COVID-19 hacia la muerte es la crisis respiratoria. La mayoría de pacientes evoluciona una neumonía tan rápida y tan crítica que el tiempo y los recursos para su recuperación terminan siendo escasos.

Esta técnica que se ha repetido en miles de nosocomios acondicionados para el tratamiento de coronavirus tiene una principal función: aumentar la cantidad de oxígeno en las vías respiratoria y así evitar la obstrucción de los pulmones.

Conocida como “decúbito prono” (en términos comunes, boca abajo), esta técnica logra que la sangre fluya y así eviten el daño constante que le provoca el avance de la enfermedad.

"Muchos de los pacientes con coronavirus no están oxigenando bien sus pulmones y eso los daña. Y aunque en los centros médicos les administramos oxígeno, en ocasiones parece no ser suficiente. Y así, lo que hacemos es acostarlos boca abajo para permitir que los pulmones se vuelvan a expandir”, dijo Panagis Galiatsatos, profesor de medicina pulmonar y cuidados intensivos de la Escuela de Medicina de la Universidad Johns Hopkins, para la BBC.

“La abertura de los pulmones en decúbito prono permite que haya más flujo de sangre. El cambio es notable y lo hemos confirmado con muchos pacientes”, agregó.

Los riesgos de la pronación

El mismo artículo publicado por la BBC explica que, a pesar de ser una técnica que colabora mucho con el flujo de aire en los pulmones y evitar la obstrucción de la sangre, requiere de muchas manos para lograrlo y, además, conlleva riesgos.

“Se requiere un número suficiente de profesionales experimentados. No es fácil. Se necesitan de cuatro a cinco personas para lograrlo de manera efectiva”, recalca la Organización Mundial de la Salud (OMS).

A su vez, apunta a la serie de complicaciones agregadas que pueda tener uno de esos pacientes. “La obesidad es una de las mayores preocupaciones. También se debe tener cuidado con las personas que tengan lesiones en el pecho. Y hay que ser precavidos en caso de que el enfermo tenga un tubo de respiración o un catéter en el cuello”, explicó Galiatsatos.

TE PUEDE INTERESAR:

VIDEO RECOMENDADO:

Atlético Madrid ofrece cocinas para familias vulnerables

Tags Relacionados:

Contenido Sugerido

Contenido GEC

Te puede interesar:

Pirola, variante nueva del COVID-19: qué es, síntomas y el tratamiento

COVID-19: qué es la variante Pirola, sus síntomas y más

COVID-19: síntomas y más sobre EG.5, la contagiosa variante del coronavirus que está en Estados Unidos y México

Temporada de virus: reconoce los síntomas y obtén tu diagnóstico

Fin de la emergencia internacional por COVID-19: qué significa el anuncio de la OMS

James Cameron da positivo a COVID-19 y no podrá asistir al estreno de “Avatar”

Deporte y salud mental: ¿cómo la actividad física ayuda a combatir la depresión?