Alex y Jane Hamilton son una pareja de nonagenarios del Reino Unido quienes se aman con todo su corazón, pero su historia no se ha vuelto tendencia en diversas redes sociales por el lindo afecto que se profesan a lo largo de décadas, sino que han causado gran impacto entre los usuarios porque recién se han casado luego de estar comprometidos, aunque usted no lo crea, durante poco más de 60 años.
Amor a primera vista
Él tiene 90 años y ella 89, y se dieron el “sí, acepto” en Clackmannanshire, Escocia, el pasado sábado 21 de mayo, en cuya ceremonia la novia iba en silla de ruedas eléctrica la cual lució en su trayecto por el pasillo hacia el altar.
Cuando el relato se hizo tendencia, Southwest News se comunicó con Sally McDonald (59), hija de la pareja, quien comentó respecto a sus padres: “Por lo general, a esta edad la gente está pensando en los funerales, pero esta fue una gran celebración y fue, realmente, hermoso”.
Pero ¿Cómo se conocieron nuestros protagonistas? Sucedió en 1956 y, de inmediato, se enamoraron, pero, había un gran problema; ambos estaban casados con otras personas, con hijos pequeños, por lo que esperaron 6 años para poder separarse de sus entonces parejas para poder estar juntos.
Una propuesta que tomó tiempo
Sin embargo, sería en 1962 cuando Alex preguntó a Jane si quería casarse con él. Ella aceptó, pero, la “vida ocupada” de los dos se convirtió en un inconveniente para poder planear su boda ¿Por qué razón? Simple, la novia tenía un hijo, mientras que el novio contaba con dos, pero no pasó poco tiempo para que tuvieran los suyos propios, por lo que llegaron dos pequeños más.
Dado que aún no podían casarse, la mujer decidió cambiarse de apellido al de su pareja, razón por la cual sus hijos no supieron que sus padres no estaban casados durante mucho tiempo.
La familia reunida
Solo ellos saben qué los llevó a casarse tras 60 años de noviazgo, pero, sin importar lo anterior, a la ceremonia asistieron sus 5 hijos, acompañados de 11 nietos con sus respectivas familias.
Sally, por su parte, reveló al medio de comunicación antes mencionado, que el servicio fue perfecto, un justo resumen a la vida de sus padres: “Era como si así debió ser, mirando lo que habían hecho juntos y la familia unida para la celebración”.
Jane fue acompañada en todo su trayecto por el pasillo por Claire McDonald (29), su nieta, mientras que su nieto Craig McDonald (23) horneó el pastel de bodas, el cual decoró con flores silvestres comestibles.
Sigue encendida la llama del amor
De hecho, la hija del ahora matrimonio, describió a sus padres como una pareja “poco convencional” por vivir sin contraer boda en una época mucho más conservadora y que, a pesar de los años, ambos están muy enamorados:
“Si salimos a cenar con ellos, los dos se miran desde el otro lado de la mesa, siempre son tan descarados y coquetean entre ellos. Es como tener un nuevo novio, solo que han sido así durante 60 años. Todavía salen en citas pequeñas. Son, realmente, lindo. Mamá todavía se ríe como una colegiala cuando papá le sonríe”, sentenció.