Mantener tu freidora de aire en condiciones óptimas es esencial para disfrutar de comidas deliciosas y saludables. El bicarbonato de sodio se presenta como la solución natural para una limpieza efectiva y sencilla, asegurando que cada bocado sea perfecto. Una forma efectiva y natural de limpiar tu airfryer es utilizando bicarbonato de sodio. Hoy en Depor te digo cómo hacerlo paso a paso:
Cómo limpiar la freidora de aire con bicarbonato
Sigue estos pasos para eliminar la grasa y los residuos acumulados, garantizando comidas más saludables y una freidora que perdure en el tiempo.
Materiales necesarios:
- Bicarbonato de sodio
- Agua
- Cepillo suave o esponja no abrasiva
- Paño limpio y seco
- Jabón suave (opcional)
Instrucciones:
- Desconexión y enfriamiento: Antes de comenzar cualquier tarea de limpieza, asegúrate de desconectar la freidora de aire de la corriente eléctrica y permitir que se enfríe completamente. Trabajar con la freidora aún caliente puede ser peligroso y dañino.
- Extracción de la cesta y la bandeja: Retira la cesta y la bandeja de la freidora. Estos componentes suelen ser aptos para lavavajillas, por lo que puedes lavarlos allí si lo prefieres. De lo contrario, puedes lavarlos a mano con agua tibia y jabón suave. Enjuágalos bien y sécalos antes de volver a colocarlos en la freidora.
- Creación de la pasta de bicarbonato: Mezcla bicarbonato de sodio con agua para crear una pasta espesa. La cantidad de bicarbonato de sodio dependerá del tamaño de tu freidora, pero generalmente, una cucharada o dos deberían ser suficientes.
- Aplicación de la pasta: Aplica la pasta de bicarbonato de sodio en las áreas interiores de la freidora que presenten acumulación de grasa y residuos. Presta especial atención a las paredes y la parte inferior. Deja que la pasta actúe durante unos 15-20 minutos. El bicarbonato de sodio ayudará a aflojar la grasa y a eliminar los olores desagradables.
- Cepillado suave: Utiliza un cepillo suave o una esponja no abrasiva para frotar suavemente las áreas con la pasta de bicarbonato. Realiza movimientos circulares para eliminar la grasa y los residuos adheridos. Si es necesario, puedes agregar un poco más de pasta en las áreas más problemáticas.
- Enjuague y secado: Una vez que hayas frotado todas las áreas afectadas, enjuaga la freidora con agua tibia para eliminar la pasta de bicarbonato y los residuos sueltos. Luego, seca cuidadosamente el interior con un paño limpio y seco.
- Limpieza exterior: No te olvides de limpiar el exterior de la freidora. Utiliza un paño húmedo con una pequeña cantidad de bicarbonato de sodio para eliminar manchas y suciedad en la superficie exterior. Una vez que todo esté limpio y seco, vuelve a colocar la cesta y la bandeja en su lugar.
- Encendido y precalentamiento en vacío: Antes de cocinar nuevamente con la freidora, enciéndela y precaliéntala durante unos minutos sin ningún alimento en su interior. Esto ayudará a eliminar cualquier residuo restante y a garantizar que no queden rastros de bicarbonato de sodio.