Lex Ginger se ha vuelto tendencia de TikTok por contar una historia que ha dejado impresionados a todos los usuarios de esta red social. La mujer de los Estados Unidos confesó que tuvo un embarazo gemelar monoamniótico, noticia que la sorprendió, pues le aseguraron que no podría salir en estado debido a una particular condición física.
El video viene acumulando más de 21.9 millones de reproducciones, en el cual nos relata que en 2018 se enteró que estaba en cinta, pero estaba preocupada pues tenía una condición preexistente que afectaba su fertilidad. A Today confesó: “Me habían dicho que sería muy difícil quedar embarazada porque tengo síndrome de ovario poliquístico y factor V, que es un trastorno de la coagulación de la sangre”.
Le hicieron un ultrasonido a las 6 semanas, el doctor quedó impresionado con la fuerte actividad cardiaca que se reportaba, pero vio que todo iba normal; pero una semana después no podía comer ni beber agua, le detectaron hiperémesis gravídica, que no son más que náuseas y vómitos intensos.
Cuando asistió a su doctora, esta se vio preocupada por lo enferma que lucía, por lo que le hicieron una ecografía, pero los resultados impresionaron a todos pues había gemelos, pero ella no lo creía porque 7 días antes detectaron un solo saco vitelino, pero era verdad, los bebés del tamaño de un frejol compartían el mismo espacio.
Lex confiesa que tenía sentimientos encontrados pues no se sentía preparada para ser madre de dos hijos con 26 años, pero luego se mostró agradecida por haber superado sus problemas de fertilidad: “Me di cuenta de que estaban muy juntos, así que le pregunté si estaban unidos y ella dijo que podrían estarlo”.
La mujer aseguró que su ginecóloga le dijo que había escuchado de los embarazos monoamnióticos, pero que nunca se topó con uno ¿Qué quiere decir esto? Que son gemelos idénticos que comparten el mismo saco amniótico y la placenta.
Pero, las estadísticas no están a favor de este tipo de embarazos pues el 50 por ciento de estos supera las 12 semanas: “No he visto un especialista en medicina materno fetal antes de las 14 semanas porque, realmente, no hay nada que puedan hacer”, tras esto fue todas las semanas a controles para asegurarse que los bebés sigan vivos.
Este tipo de noticias la deprimió profundamente, por lo que tuvo que acudir a terapia, la cual mejoró notablemente cuando le confirmaron que tras la semana 14 ambos pequeños estaban estables: “Si puedes tomar terapia, hazlo porque eso marcó una gran diferencia y me ayudó a replantear las cosas. También ayuda a que mi esposo sea, simplemente, una persona asombrosamente positiva. Los embarazos de alto riesgo te quitan el plan y la visión de las manos”.
A las 22 semanas, celebraron el baby shower, pero le costó convencer a su esposo porque el suyo era un embarazo de alto riesgo. A las 25, ingresó al Tampa General Hospital para ser vigilada día y noche por especialistas en medicina fetal: “Había una pequeña máquina a mi lado donde podía escuchar los latidos de sus corazones, lo cual era muy reconfortante y cálido”.
En adelante, el embarazo marchó de forma normal, al punto que se graduó como abogada en la sala de maternidad y, finalmente, a los 32, se sometió a una cesárea planificada: “Había una sensación de euforia en el aire, como si lo hubiéramos logrado”, y, finalmente, los trajo al mundo el 16 de mayo de 2019. Ambos estaban completamente sanos.
Pese a estos, y por seguridad, los bebés pasaron 30 días en la unidad de cuidados intensivos neonatales donde controlaron la respiración, succión y deglución, tras lo cual fueron llevados a casa.
En la actualidad, Lex se mantiene en contacto con madres (muchas de estas con gemelos) que se sienten solas o asustadas a las cuales les ofrece consejos por medio de las redes sociales. “Mantente alejada de Google, busca un terapeuta si puedes y trata de mantenerte lo más positiva posible”, sentenció a Today.
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