La razón por la que Jennifer Lawrence hizo dieta para filmar una película

Jennifer Lawrence es una de las actrices más exitosas de Hollywood. En cada proyecto en el que ha participado ha demostrado su talento, su profesionalidad y su entrega en cada personaje que ha interpretado. De todos los proyectos que ha hecho, uno en especial le demandó a la actriz estadounidense hacer una dieta rigurosa y ponerse en entrenamiento.

Tras saltar a la fama como heroína en “Los juegos del hambre” (2012-2015), la carrera de Jennifer Lawrence fue en ascenso rápidamente. Sus películas han recaudado más de $6 mil millones en todo el mundo hasta la fecha y se convirtió en la actriz mejor pagada del mundo en 2015 y 2016; confirmando así que es una de las celebridades más importantes de la industria.

De todos los papeles que interpretó, hay uno que le exigió a Jennifer Lawrence hacer dieta. La actriz ha mencionado en varias entrevistas que no le gusta hacerlo, pero hizo una excepción para un proyecto en especial: “Red Sparrow”, conocida en Hispanoamérica como “Operación Red Sparrow” y en España como “Gorrión rojo”. ¿Qué dijo sobre esta experiencia? Aquí te lo contamos.

LA ÚNICA PELÍCULA POR LA QUE JENNIFER LAWRENCE HIZO DIETA Y POR QUÉ

Jennifer Lawrence interpretó el papel de Dominika Egorova, una espía rusa que hace contacto con un agente de la CIA (interpretado por Joel Edgerton) en la película de drama y suspenso “Red Sparrow” de 2018.

La actriz estadounidense adoptó un acento ruso y tomó clases de ballet por cuatro meses para darle credibilidad a su personaje. A demás, Jennifer Lawrence tuvo que someterse a una dieta rigurosa.

“Gorrión Rojo fue la única vez que tuve mucha hambre y disciplina”, dijo Jennifer Lawrence en una entrevista con motivo del estreno de Gorrión Rojo en 2018.

En aquella entrevista, según recoge SensaCine, la intérprete admitió que no le gusta hacer dieta, pero que hizo una excepción para la cinta. “No puedo trabajar a dieta. Tengo hambre. Estoy de pie. Necesito más energía”.

Jennifer Lawrence también estuvo varios meses trabajando intensamente con un instructor de baile que le permitiese perfeccionar el movimiento y la imagen corporal. “No puedo estar en el personaje de una exbailarina y no sentirme como una exbailarina”, explicó.

Por su parte, su entrenador respaldó estas afirmaciones: “Trabajé con Jen seis días a la semana, tres horas al día”, aseguró el coreógrafo Kurt Froman en un vídeo detrás de las cámaras de la película.