Miles de fans en todo el mundo recuerdan con alegría “Dragon Ball Z”, el anime secuela de “Dragon Ball” que continuó las aventuras de Gokú y sus amigos cuando este había crecido de forma apresurada. Si bien los Guerreros Z tuvieron muchos enemigos a lo largo de esta saga, no hay duda que uno de los más extraños y difíciles de derrotar fue Cell.
La denominada Saga de Cell comenzó como la segunda parte de la Saga de los Androides, cuando Gokú y sus amigos enfrentaron a estos enemigos que destruirían a todos los seres vivos y ni siquiera los Guerreros Z los destruirían. Gracias a Trunks, esto no sucedió, pero luego se liberó la máxima creación del Dr. Gero.
Se trataba de Cell, un androide que combinaba el material genético de los mejores guerreros que encontró el doctor en la Tierra. Sin embargo, despertó en una forma imperfecta, necesitando absorber al Androide 17 y 18 para lograr su máximo potencial. Al hacerlo, él organizó un pequeño torneo llamado “Los Juegos de Cell”.
En realidad, él se creía tan poderoso que creía que vencería a cualquier sin problemas y, por aburrimiento, creó este torneo de artes marciales. Lo que no esperaba es que Gokú lo dejara al borde de la muerte, pero antes de acabar con él, decidió rendirse y darle a Cell una semilla del ermitaño. ¿Por qué hizo esto?
LA VEZ QUE GOKÚ LE DIO UNA SEMILLA DEL ERMITAÑO A CELL EN “DRAGON BALL Z”
Para muchos, esta decisión fue una de las peores que el protagonista de “Dragon Ball Z” pudo tomar. Después de que Cell haya matado a varios humanos, vencido a sus compañeros y amenazar con destruir la Tierra, vencerlo en “Los Juegos de Cell” era una oportunidad única que Gokú dejo escapar. Sin embargo, tenía sus razones.
En ese momento nadie, ni siquiera Vegeta y los Guerreros Z que veían atónitos lo que pasaba, comprendían las acciones de Gokú. No solo había vencido a Cell en un combate cuerpo a cuerpo y estaba malherido, sino que se rindió alegando la diferencia de poderes y decidió que su siguiente oponente sería Gohan, su hijo.
Por si esto fuera poco, le dio a Cell una semilla del ermitaño, un alimento mágico que les permitía a los Guerreros Z recuperarse de sus heridas sin importar su gravedad, solo necesitaban que el usuario siguiera vivo al momento de ingerirlas para que puedan recuperarse completamente en cuerpo y alma.
Luego de revelar que Gohan sería el guerrero que vencería a Cell de una vez por todas, confirmándole que él era más fuerte que Cell y Gokú juntos, Gokú le pide una semilla del ermitaño a Krillin, quien se la da pensando que era para él. Para sorpresa de todos, Gokú se la da a Cell, quien se recupera y amenaza a todos nuevamente.
Aún así, Gokú estaba tranquilo. ¿Qué pasaba por su cabeza en ese entonces? La verdad, Gokú tenía mucha razón. Gohan si era más fuerte que cualquiera en ese momento y tenía el potencial de alcanzar el Super Saiyan 2. Sin embargo, no había despertado su poder porque no había una amenaza lo suficientemente grande como para hacerlo.
Por ello, Gokú pensó que dejar que él peleara contra Cell despertaría su potencial por simple deseo de supervivencia. Lastimosamente, Gohan no despertó este poder sino hasta después de que casi todos estaban moribundos y que el mismo Cell asesinara al Androide 16 frente a los ojos de Gohan.
Pero este no era el plan completo de Gokú, también tenía un plan de contingencia. Cuando Cell vio que no podía derrotar a Gohan con todo su poder, decidió autodestruirse junto con el planeta Tierra y todos sus habitantes. Gokú entonces se adelantó y utilizó la técnica especial de tele transportación para salvarlos a todos.
De no ser porque Cell volvería poco después de su autodestrucción, el plan de Gokú era uno completo que permitía a Gohan desarrollar su verdadero potencial frente a Cell. Incluyendo su autodestrucción, el darle la semilla del ermitaño a Cell siguió con todo el plan de Gokú y demostró justamente lo que él había dicho: que Gohan era más fuerte que todos y necesitaba que Cell estuviera recuperado para demostrarlo.