“El cuerpo en llamas” es una serie española de Netflix dirigida por Jorge Torregrossa y Laura Mañá, y que se basa en una historia de la vida real. Se trata del crimen de la Guardia Urbana que tuvo lugar en 2017 cuando un hombre apareció calcinado en el pantano de Foix, en Barcelona.
“La investigación del homicidio sacó a la luz una red de relaciones tóxicas, engaños, escándalos sexuales y violencia entre varios agentes policiales de Barcelona”, adelantó el gigante del streaming sobre la ficción escrita por Laura Sarmiento.
Entonces, ¿cuál es la verdadera historia detrás de la serie “El cuerpo en llamas”? ¿Qué sucedió exactamente con la víctima, el agente Pedro Rodriguez? y ¿Qué pasó con los principales sospechosos, Rosa Peral y Albert López?
El 4 de mayo de 2017, la policía encontró un automóvil quemado cerca del Pantano de Foix, un embalse construido cerca de Vilanova i la Geltrú y en la maletera, el cuerpo carbonizado de un hombre de 30 años con una herida de bala. Gracias a una serie de prótesis que tenía en la espalda, fue identificado como Pedro Rodríguez, agente de la Guardia Urbana.
Las investigaciones señalaron como principales sospechosos del crimen a otros dos agentes: Rosa Peral, la pareja de la víctima, y a Albert López, el amante de la mujer, quien meses atrás había denunciado un caso de porn revenge contra ella por parte de otro agente.
Por su parte, Pedro Rodríguez estaba suspendido por agredir a un motorista cuando fue asesinado y Albert López participó en la detención de un hombre que murió mientras estaba en custodia.
Rosa y Albert fueron acusados de matar a Pedro Rodríguez en la madrugada del 1 de mayo de 2017 y de trasladarlo en el maletero de su coche hasta el pantano de Foix y llevados a juicio en febrero de 2020, donde se presentaron declaraciones contradictorias y conversaciones que solo complicaban más su caso.
Rosa Peral acusó a su amante de asesinar a su novio por celos, mientras que Albert López aseguraba que ella mató a Pedro debido a que este la agredió y posteriormente, le pidió ayuda para deshacerse del cuerpo. Sin embargo, para la fiscalía ambos eran culpables y se trataba de un asesinato planeado y premeditado.
A finales de marzo de 2020, tras seis días de deliberación, ocho de los diez miembros del jurado los declararon culpables del asesinato de Pedro Rodríguez. Albert López fue condenado a 20 años de cárcel y Rosa Peral recibió una pena de 25 años de prisión.
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