“Dragon Ball Z” es la secuela de “Dragon Ball” que en esta nueva etapa sigue las aventuras de Son Goku, pero en su vida adulta. Si bien, él, junto con sus compañeros, continúa defendiendo la Tierra contra villanos que van desde alienígenas como Vegeta y Frieza, androides (Cell) y criaturas mágicas (Majin Buu), al igual que los demás vive su día a día como cualquiera.
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Es así que en uno de los episodios vemos a nuestro personaje favorito buscar a una persona que le enseñe a manejar para poder obtener su licencia de conducir y movilizarse tranquilamente sin ayuda de nadie. A continuación, te contamos lo que sucedió en ese memorable capítulo.
La idea de que Gokú busque obtener su brevete surge de Chichí, quien al estar cansada de ir sola a hacer las compras y retornar a pie, lo amenaza junto a Piccolo de no cocinarles si es que no aprenden a conducir un coche.
Ante la advertencia, los guerreros se inscriben en un centro para aprender a manejar. Mientras que a Piccolo le asignan una profesora amante de la velocidad, Gokú es dirigido por un instructor mayor de 70 años, quien padece la incompetencia del joven frente al volante.
En una de las escenas, su maestro le pide el volante para poder detener el carro y él usando su fuerza saca el timón y se lo entrega, haciendo que al final los dos terminen en el agua. “Te tomará tres años para obtener el permiso para conducir”, le dice mientras se hunden.
Pero eso no termina ahí, pues cuando ve a Piccolo yendo a gran velocidad, Gokú, quien ya está al volante, hace lo mismo y comienza una carrera que termina en una explosión. Por fortuna, ambos rescatan con vida a sus instructores.
Como ellos deben aprende a manejar, reemplazan los coches para continuar entrenando, pero bajo la lluvia en una carretera montañosa. Para su mala suerte, provocan un accidente con un bus escolar, por lo que hacen uso de sus poderes para rescatar a sus ocupantes. Ante el espectáculo y ver que todo salió bien, el instructor les dice que no necesitan el carné de conducir, pues tienen dones más grandes.
Ellos regresan a casa y le cuentan toda a Chichí, quien al no creer que no pudieron sacar su brevete cae desmayada por la incompetencia de ambos.
Después de tres años de este suceso, en la casa de Gokú se ve un vehículo estacionado. Al final lograron obtener la licencia, aunque ese capítulo no pudo verse en la pantalla, publicó Hobby Consolas.
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