El Día Mundial del Backup se celebra cada 31 de marzo y es un buen momento para evaluar todo el contenido que tienes en tus dispositivos y salvarlos de cualquier robo o problema técnica. Ante la multiplicidad de causas que podrían desencadenar tal escenario, los expertos en ciberseguridad de ESET ofrecen una orientación sobre cómo llevar a cabo un backup adecuado, explorando opciones actuales y subrayando errores comunes a evitar.
Recuerda que entre las múltiples causas de pérdida de información se encuentran la vida limitada de los discos duros, el robo o extravío de dispositivos, y la acción de códigos maliciosos, como el ransomware, que encripta archivos exigiendo un rescate monetario para su recuperación. Además, recuerda que no hace falta hacer una copia de todo lo que tienes. ESET enfatiza la necesidad de discernir la importancia de los datos al realizar un backup, considerando variables como preferencias individuales, naturaleza del trabajo y utilidad de la información.
Opciones para hacer backup
- Disco rígido: idealmente se debe utilizar uno exclusivamente con este propósito para evitar un desgaste innecesario. Asimismo, si es un disco interno debe ser uno físicamente distinto al que se utiliza para iniciar el sistema operativo.
- Dispositivo de almacenamiento USB: es recomendable utilizar uno exclusivamente para respaldos y evitar transportarlo fuera de donde se lo guarde para evitar extravíos.
- En la nube: tiene la ventaja de facilitar el acceso a la información desde prácticamente cualquier lugar con una conexión a Internet. Sin embargo, es importante considerar las políticas de uso del servicio elegido y los sistemas de protección que se utilizan para resguardar los datos. Google, por ejemplo, pone a disposición una guía para usuarios, donde detalla este servicio.
Tras la selección de la información a respaldar y el medio elegido, se debe establecer la periodicidad con la que se debe realizar la copia de seguridad. Para tomar esta decisión es necesario contemplar la frecuencia con que se modifican, eliminan y crean archivos. Es decir, si se trabaja todos los días en un proyecto, será necesaria una copia de seguridad diaria. En el caso opuesto, una carpeta con fotos debe ser nuevamente respaldada solamente cuando se agreguen fotografías. Establecida la frecuencia, se pueden elegir entre 3 tipos diferentes de copias de seguridad:
- Completa: se respaldan todos los archivos del equipo, por lo que llevará más tiempo y espacio de almacenamiento. Se puede elegir esta opción en un primer momento, y luego variar.
- Diferencial: contiene los archivos que han cambiado en el sistema desde la última vez que se hizo una copia completa. Cada copia que se realiza, respalda lo que es diferente desde la última copia de seguridad. Se recomienda para una frecuencia diaria de backup.
- Incremental: respalda los archivos que se han modificado desde la última copia de seguridad diferencial o incremental. Al hacer las copias de seguridad con menor cantidad de datos, se realizan más rápido y requiere un espacio menor de almacenamiento.
Los errores más comunes al realizar un backup
ESET advierte sobre los riesgos de mantener unidades de respaldo conectadas a la misma red de producción, lo que podría comprometer su integridad en caso de infección. Se recomienda también no almacenar el dispositivo de respaldo junto con el principal para evitar pérdidas totales en caso de robo o extravío.
Es esencial verificar la integridad de las copias de seguridad inmediatamente después de su creación, garantizando su accesibilidad y correcta transferencia de archivos. Además, se subraya que el respaldo de datos no reemplaza la necesidad de una sólida solución de seguridad. Ambos son complementarios, ya que mientras el software antivirus protege contra amenazas informáticas, el backup asegura la recuperación de información valiosa en caso de incidentes.
Camilo Gutiérrez Amaya, Jefe del Laboratorio de Investigación de ESET Latinoamérica, destaca: “La información es un activo fundamental para empresas y personas. Por ello, realizar respaldos frecuentes es una práctica prioritaria. Para garantizar la seguridad de la información, es crucial realizar el backup correctamente, considerando diversos aspectos como los tipos de respaldos, medios de almacenamiento y la frecuencia de los procesos”.