Paper Mario ya es una franquicia bastante importante para Nintendo y después de la polémica con The Origami King, se decidió por regresar a una de las entregas más queridas. Paper Mario: The Thousand-Year Door es el título que nos llega a modo de remake para Nintendo Switch y que a pesar de que es un juego con una calidad asegurada, también ha sido parte de una pequeña polémica.
En contexto
Paper Mario: The Thousand-Year Door nos pone en la piel de Mario en la búsqueda de la princesa Peach. Después de recibir un mapa del tesoro, se embarca en la búsqueda de unos cristales que abren la misteriosa The Thousand-Year Door (Puerta Milenaria). Esta llevará a Mario de viaje por todo el reino, conociendo personajes muy pintorescos y enemigos bastante carismáticos.
Mecánicas
A nivel jugable, el título se mantiene como un RPG por turnos con mucha interacción, no solo es elegir los movimientos correctos, sino que también debemos realizar diversas acciones que nos ayudarán en combate. Esto sigue funcionando de maravilla ya que nos ayuda a siempre estar activos dentro de un sistema de batalla que sin ser tan profundo, tiene lo necesario para hacernos pensar en muchas situaciones.
La historia se sigue de forma muy lineal y aunque existen misiones secundarias que aumentan la experiencia con interesantes recompensas, este juego se disfruta muchísimo más si vas a tu propio ritmo. Cada personaje es interesante y tiene algo que contar. La construcción del mundo es muy coherente y demuestra que incluso el diseño, se hizo un trabajo sobresaliente.
Con estilo
El sello de Paper Mario siempre ha sido el humor y la forma en cómo se trata al juego mismo, desde referencias culturales hasta romper la 4ta pared. Es increíble que después de 20 años, el juego se mantenga con la misma firmeza.
Algo que se le criticó mucho a The Origami King es la poca progresión que tenía el personaje, en este caso regresa la subida de niveles y aunque el grindeo no es tan necesario, La Puerta Milenaria ofrece la posibilidad de que el jugador pueda crecer de la forma que mejor crea conveniente.
En pantalla
Comparado al juego original, este remake respeta mucho lo logrado por el videojuego en Gamecube, desde el diseño hasta la paleta de colores. La banda sonora se siente de mejor calidad y eso se agradece, ya que muestra una vez más que en su momento era un producto muy redondo. Quizás a nivel visual y de arte, no consigue el gran nivel que tenía The Origami King que era superlativo.
Discusión
Quizás la más polémica más grande alrededor del título es la cantidad de cuadros por segundo. Si bien la versión de Gamecube corre a 60 fps, mucha gente no entendía como esta versión corre a 30 fps. Si bien hay mejoras en la calidad de vida, no es seguro que eso justifique el sacrificio de la fluidez. Muchos dicen que al ser un RPG por turnos, no es necesario la fluidez, pero generalmente al realizar un remake vemos mejoras, no lo contrario. Personalmente, lo peor del juego.
Conclusión
Paper Mario: The Thousand-Year Door es un juego divertido y con mucha identidad, como todas las entregas de la franquicia. Un juego con muchas horas por delante y con un gran mensaje. Espero que Paper Mario continúe por este camino ya que esta es de esas ocasiones donde es bueno aprender del pasado para mejorar los títulos del futuro. Este videojuego, se vuelve a convertir en un clásico, ahora, en el ocaso de la Nintendo Switch.
El análisis de Paper Mario: The Thousand-Year Door fue desarrollado gracias a una copia digital enviada por Nintendo para Nintendo Switch.
FICHA
Plataforma: Nintendo Switch
Desarrolladora: Nintendo
Género: Arcade, Plataforma
Distribuidor: Nintendo
Puntuación: 8.5