PlayStation ha trabajado por muchos años en su nueva consola: PS5. Ya lleva dos años en el mercado y se ha roto varios récords en ventas en todo el mundo. Poco a poco, se va llenando la biblioteca de juegos e inclusive podría llegar una nueva versión en 2023 o 2024.
La gran pregunta es qué cambiaría Sony con respecto a su anterior consola para justificar un precio más alto. Pues posiblemente veremos un cambio del chip gráfico o quizás como la PS4 Pro solo opten por aumentar las frecuencias del procesador.
En este último caso, deberán buscar una nueva tecnología de refrigeración o modificar el orden interno del hardware para que ventile con mayor eficiencia. Recordemos que la PS4 cuenta con un procesador Jaguar de AMD en 28 nm con 8 núcleos a 1,6 GHz, mientras que la PS4 Pro tiene el mismo procesador AMD pero en 16 nm con 8 núcleos a 2,13 GHz.
También se podría aumentar el almacenamiento interno para llegar al Terabyte o más. Cerca de 200 GB son utilizados para el sistema operativo y otros archivos necesarios para que la consola funcione.
Al aumentar el tamaño de los juegos, también se necesita un almacenamiento extendido, especialmente si optamos por comprar la PS5 edición digital que no cuenta con lector de discos.
Esta nueva consola PS5 Pro podría también representar la actualización del controlador DualSense. Posiblemente, se escuche a la comunidad y se opte por añadir una batería extraíble.
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