Romulo Airaldi estudió para ser ingeniero agrónomo. Su familia se dedicaba a eso y quiso seguir sus pasos. Sin embargo, quiso hacerse un camino propio y fue manejando una cuatrimoto que lo consiguió, y qué mejor que en el Rally Dakar.
Por segunda vez en su vida, Rómulo se embarca en el rally más difícil del mundo. La primera vez tuvo una excepcional participación, pero ahora va por más.
"Solo el 10% que corren el Dakar por primera vez, lo terminan. Fue agradable ser parte de esa estadística en el 2016. Ahora voy por más y me gustaría llegar entre los 10 primeros en la categoría de cuatrimotos", señala el piloto de Can-am.
A pesar de ello, sabe que no será fácil. "Un dakar es un recorrido, un trazado complicado para todos. La navegación en el desierto es complicada. Los peruanos vamos a avanzar mejor que otras nacionalidades, pero el camino va a ser duro", finalizó.
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