Su vida acaba de dar un gran cambio tras dejar el Bayern Munich luego de 10 años y fichar por el Olympique de Lyon, pero podría dar otra sorpresiva vuelta, pues está arriesgando cinco años de cárcel. El defensor alemán Jerome Boateng está en el ojo de la tormenta y a un paso de perder la libertad, por una denuncia de violencia realizada por la madre de sus hijos, Sherin Senler.
La joven culpa al actual jugador del Olympique de Lyon de “haberla lastimado durante una violenta discusión hace tres años mientras estaba de vacaciones” aportando como prueba un parte de lesiones físicas que presuntamente le provocaron los malos tratos.
Boateng, que siempre se ha defendido de las acusaciones de su ex calificando el tema como “un asunto privado basado en acusaciones no probadas de terceros”, deberá comparecer este mismo jueves ante el tribunal de Múnich para responder ante las acusaciones.
El jugador de 33 años es toda una figura pública en Alemania, donde con el Bayern Munich ha alcanzado numerosos títulos y se ha convertido en un referente no solo en el deporte.
Pero los problemas extrafutbolísticos no son nada nuevo para el defensor. En febrero de este año su exnovia, la modelo Kasia Lenhardt fue encontrada muerta en su departamento mientras el futbolista estaba disputando el mundial de clubes.
Boateng y Sherin Senler vivieron una historia de amor de lo más intensa llena de idas y venidas, y mucha polémica. En el año 2011, se convertían en padres de dos gemelas, Soley y Lamia, aunque la sombra de algunas deslealtades por parte del futbolista terminaron por dinamitar la relación.
Dos años más tarde, decidían darse una nueva oportunidad y reconciliarse para terminar, finalmente, en los juzgados. Cabe mencionar que el alemán y Senler también mantienen una batalla judicial por la custodia de sus hijas.
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