Diego Maradona llegó a los 60 años, pero no de la manera en la que sus fanáticos hubieran deseado. La preocupación se instaló entre los familiares del astro argentino y su expareja, Rocío Oliva, salió al frente para responder las acusaciones de la actual pareja del exjugador sudamericano, quien la había señalado como una de las responsables del actual estado de salud del DT de Gimnasia y Esgrima de La Plata.
“El 9 de septiembre lo internaron por lo mismo. Son tres días de chequeos y hoy nuevamente fue a la clínica. En este caso, estuvo más deteriorado que antes. Acá lo que pasa es simple, vos lo podés internar tres o cuatro días y ponerlo bien. Que esté hidratado, que tenga vitaminas, pero no es la solución. Diego toma pastillas para dormir, pero acá el problema de él es el alcohol. Diego sigue tomando alcohol, el que dice que no es un mentiroso. Hay que internarlo por su adicción al alcohol”, sostuvo la expareja del ’10′ en diálogo con ‘Súper Mitre Deportivo’.
Oliva se mostró indignada por la decisión que tomó La mamá de Dieguito, hijo de Maradona, de llevar al entrenador hasta la cancha del ‘Lobo’, a pesar de que su estado de salud se veía afectado y no estaba en condiciones de asistir.
“A raíz de la internación de Diego Maradona, hablamos con Claudia (exesposa del ’10′). Gianina fue a saludar antes de que vaya a la casa y estaban bien, luego viene Verónica Ojeda (mamá del hijo de Maradona) y le dijo que tenía al estadio por su cumpleaños porque la gente lo estaba esperando, había armado todo por él. La insistencia fue un poco de ella y me parece muy bajo cuando se tiene la salud en el medio”, agregó.
Leopoldo Luque, médico de Diego Maradona, aseguró que el ’10′ fue internado por un “bajó anímico que afectó su alimentación”. La idea es que permanezca en observación unos días.
“Diego no entró de urgencia. No es que esté crítico ni nada por el estilo. Se encuentra mejor que ayer. La idea es que siga acá unos días más”, explicó el médico.
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