El equipo argentino de fútbol Vélez Sarsfield suspendió el martes a dos jugadores acusados de abuso sexual de una mujer durante una fiesta a fines de 2020. El delantero Thiago Almada, joven prospecto del club, y el defensa Miguel Brizuela fueron imputados por fiscales especializados en violencia de género en San Isidro, al norte de Buenos Aires, donde se hizo la denuncia.
La acusadora dijo que fue abusada sexualmente por varias personas durante una fiesta en la casa de Martín Lucero, quien también juega para el club de Liniers. La celebración fue ilegal porque contó con más de los 10 invitados permitidos por las autoridades locales en medio de la pandemia de COVID-19.
Vélez Sarsfield dijo en un comunicado que los jugadores fueron apartados de su escuadra luego de que los cargos se hicieran públicos. El club tiene un protocolo contra la violencia de género en sus estatutos. Vélez dijo que los psicólogos del club seguirán a los jugadores.
“El club está disponible para la víctima y las autoridades”, dijo la escuadra de Liniers en un mensaje de apoyo para los supuestos afectados en este confuso incidente que pone bajo la lupa a los deportistas del tradicional conjunto argentino.
Cabe destacar que las leyes penales de Argentina establecen penas de hasta 15 años de prisión para los culpables de abuso sexual, sentencia que podría ser impuesta para os futbolistas, si es que se confirma el delito tras las investigaciones pertinentes por parte de la policía.
Esta es la segunda ocasión en la que Miguel Brizuela está en el ojo de la tormenta, luego de ser denunciado, a mediados de 2020, por su pareja, quien indicó que había sufrido una agresión física por parte del mencionado deportista del conjunto argentino.
Con información de AP.
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