Nadie se lo quiere perder. Real Madrid y Atlético de Madrid disputarán un partidazo cuando se enfrenten por la final de la Champions League este sábado 28 de mayo a la 1:45 pm (hora peruana). Por eso, hinchas alrededor de todo el mundo quieren ver este encuentro, porque que puede significar la primera 'Orejona' para los 'Colchoneros' o la 'Undécima' para los 'merengues'. Para estos fanáticos, "cumplir tus sueños, no tiene precio, para todo lo demás existe tu sueldo".
En un inicio las entradas costaban entre 70 a 440 euros, es decir, 79 a 503 dólares que, de acuerdo al tipo de cambio, serían 233 y 1,468 soles. La UEFA repartió 19.550 entradas a ambos equipos y las demás fueron repartidas entre dirigentes, patrocinadores y puestas a la venta para el público en general. Se espera un aproximado de 70 mil personas y, vale recordar, que todos los tickets se agotaron. Hoy, la única reventa legal vía internet la tiene Ticketbis.
En ese entonces, uno gastaba casi seis dólares (20 soles aproximadamente) por minuto en la mejor zona de San Siro para ver la final de la Champions League. Ojo, siempre y cuando el partido entre el Real Madrid y Atlético de Madrid acabara en los 90 minutos. Si se iba al alargue, uno pagaba cuatro dólares (13 soles) por minuto.
Lo cierto es que esta final ha logrado un nuevo récord: la reventa legal ha superado los 12 mil euros que es lo mismo que 13 mil dólares o 44,655 soles. Así es, aficionados de Inglaterra han pagado esa increíble cantidad de dinero por este encuentro en la mejor zona del estadio. Es decir, estos fanáticos han pagado 144 dólares – 496 soles – por minuto para un choque de 90 minutos. Si se fueran al tiempo adicional habrían "invertido" 108 dólares por minuto que serían 372 soles aproximadamente.
Si estás interesado en ir a la Final de la Champions League Ticketbis te vende la entrada más barata a 4,525 soles mientras que la más cara está en 52,202 soles y tendrías acceso VIP. Sí, te gastarías entre 50 y 580 'lucas' para ver el partido entre el Real Madrid y Atlético de Madrid. El que quiere celeste, que le cueste.
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(VP)