Marcelo sufrió en la primera parte con la velocidad y habilidad de Kylian Mbappé. Pero al final del partido, que es lo más importa se fue con una sonrisa. No solo por la victoria de Real Madrid sobre el PSG por la ida de octavos de final de la Champions League, sino porque colaboró con un gol.
El brasileño Marcelo se encargó de sellar el triunfo de Real Madrid gracias a un tanto de muy buena factura. Sobre los 86' en el Santiago Bernabéu, el lateral izquierdo se juntó con Toni Kroos y Marco Asensio. Precisamente este último le dio una gran pase, y Marcelo definió de zurda.
El Real Madrid se negó a entregar la corona de la Champions League antes de tiempo ante el PSG, el equipo al que, por inversión y estrellas, se le señala como un posible heredero, y, aupado por un doblete de Cristiano Ronaldo, irá a París con una importante ventaja de 3-1, nada definitiva pero muy importante.
A la vista de la marcha de los dos equipos esta temporada parecía que el conjunto francés podía portar con argumentos el cartel de gran favorito y, tras su abrupta salida de la competición el pasado año al sucumbir en el Camp Nou, quería reivindicarse en un escaparate como el Santiago Bernabéu.
Lo tuvo en su mano, pero el Real Madrid tiene mucho peso en Europa. Su transformación es absoluta. Y hasta cuando lo está pasando mal y sufre tiene la fortuna y el acierto que acompaña a los grandes en los momentos de la verdad. Como le ocurrió el pasado ante el Napoli, comenzó perdiendo y acabó venciendo por 3-1.