La suspensión del fútbol en Sudamérica por la pandemia de covid-19 se terminará pronto con la incorporación de nuevas costumbres, al menos en una etapa inicial, que permitan el desarrollo de partidos de forma precavida.
Así lo dejó en claro este martes el doctor Osvaldo Pangrazio, presidente de la comisión médica de la Conmebol, quien dio a conocer algunas de las sugerencias del organismo para la reanudación de actividades del balompié profesional en la región.
El galeno detalló parte del protocolo de recomendaciones médicas de la Conmebol para la vuelta al entrenamiento en la fase post coronavirus, previa a la reprogramación de encuentros oficiales.
Además de promover medidas preventivas de distanciamiento social y mejores estándares de higiene para los jugadores y demás involucrados, como lavado de manos y separación personal en espacios compartidos, la entidad aconseja que las prácticas se reanuden en grupos de cinco a seis personas, que los protagonistas acudan al centro de entrenamiento en su propio vehículo, dormir entre 7 y 10 horas, comer bien y evitar viajes no escenciales.
“El efecto de un periodo de desconfinamiento combinado con aislamiento psicológicamente produce trastornos en el deportista, que pueden llevar a la ansiedad, al pánico o a la depresión”, indicó el también director de la unidad antidopaje de la entidad, quien señaló que “los bloqueos en los países se levantarán estratégicamente y de forma gradual” para el regreso del fútbol.
Pangrazio además hizo énfasis en que los clubes y federaciones miembro deberán tener en cuenta el nivel de condición física de los futbolistas, ya que se presentan nuevamente al entrenamiento normal. En ese sentido, recomendó seguir la pauta de exámenes cardiológicos y pulmonares y actuar para prevenir lesiones.
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