Alianza Lima de Guillermo Salas cayó por 2-0 ante Atlético Paranaense y se despidió de la Copa Libertadores y de Copa Sudamericana en una edición particularmente distinta para los ‘blanquiazules’. A inicios de temporada, se tenía mucha ilusión respecto a lo que el elenco bicampeón nacional podría lograr y, más allá de contar con uno de los grupos más complicados en fase de grupos (Atlético Paranaense, Atlético Mineiro y Libertad), consiguió romper con aquella mala racha de 30 partidos sin ganar (11 años), ganó de visitante en Asunción, sumó cuatro puntos, pero también arrastró una dura mochila tanto en el torneo local como internacional: las recurrentes lesiones de futbolistas que se supondrían serían claves.