Una de las grandes tareas que tendrá el FC Barcelona en la temporada 2021-22 será concretar la renovación de Ousmane Dembélé. El contrato del atacante francés en Camp Nou va hasta el 30 de junio de 2022 y hasta el momento no hay señales claras de que vaya a seguir siendo azulgrana. De hecho, en una entrevista con el diario ‘L’Equipe’, el popular ‘Mosquito’ ha precisado que ni él ni el club “tienen prisa” para una posible extensión del vínculo.
El jugador de 24 años, convocado con la selección francesa para la Eurocopa después de una larga ausencia, aclaró que ahora “está totalmente centrado” en el torneo internacional, en el que Francia debuta el día 15 ante Alemania en su lucha por el título en el ‘Viejo Continente’.
“No lo sé, ya veremos. Nos reuniremos con la dirección”, dijo el extremo a una cuestión sobre su permanencia en el Barcelona más allá del verano de 2022. Se congratuló de poder haber encadenado 44 encuentros sumando todas las competiciones, algo inédito en sus tres últimos años, en los que estuvo castigado por las lesiones.
“He hecho mucho trabajo de prevención durante la semana, antes y después del entrenamiento. Refuerzo mis isquiotibiales que me han dado tantos problemas”, afirmó el exdelantero del Borussia Dortmund, fichado en verano de 2017 por más de 100 millones de euros.
En el Barcelona, Dembélé no consideró que haya un fin de ciclo y sí “el comienzo de algo”: citó la llegada de Roland Araújo, Oscar Mingueza, Sergiño Dest y Ansu Fati.
El campeón del mundo en 2018 también habló de su relación con Lionel Messi, cuya permanencia en el club español tampoco está asegurada.
“Es un buen tipo, un líder. Es abierto, habla mucho, me llevo genial con él desde el primer día. No me supone una presión jugar con él, da muchos consejos en el campo. Me aconseja atraer al adversario, encarar, driblar”, señaló. Así se encuentran las cosas en Camp Nou.
Con la información de EFE
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